Claudia Palacio*
En la era en que vivimos la información vuela, es cuestión de solo segundos para que una noticia se haga viral, pero como las redes son más visuales que informativas, y nuestra capacidad de atención se ha reducido sustancialmente; la información que consumimos esta presentada parcializada, diseñada para cautivar nuestra atención descartando lo que no es atractivo y para “caber” en un par de líneas. ¿Cuánto, de todo lo que se tenía que decir se quedó por fuera?
La más reciente noticia de inmigración es la de la posibilidad de que los hijos y dependientes de trabajadores en cualquier nivel de destreza (calificados o no calificados) puedan solicitar un permiso de trabajo en Canadá.
Esta fue la noticia del 2 de diciembre que llenó de esperanza, por no decir de tranquilidad, a muchos estudiantes internacionales que estaban buscando activa y frenéticamente un trabajo calificado para poder extender los permisos de trabajo de sus parejas/cónyuges, cuando ellos aplicaran al Permiso de trabajo de post graduados (PGWP) al recibir sus cartas de finalización del programa a mediados de enero.
La primera vez que el gobierno canadiense hizo referencia directa a los dependientes de portadores de PGWP fue en enero 4, cuando anuncio que a partir del 30 de enero se podrían presentar las solicitudes de quienes calificaran. Pero en esta segunda comunicación el Ministerio de Inmigración tampoco especifico cuales serían los requisitos para aplicar ni en que etapas, simplemente se limitó a hacer referencia a la noticia del 2 de diciembre donde dice que esta política pública entrará en vigor en etapas. Sin embargo, las redes sociales ya dieron por hecho que el 30 de enero los dependientes de portadores (o aplicantes en este caso) de PGWP podrán extender sus permisos de trabajo sin que el aplicante principal (estudiante) deba tener un trabajo calificado.
La combinación de La velocidad de la información -parcializada en las redes- , la falta de atención -de nosotros como lectores-, desidia para hacer investigación en la fuente y/o la reticencia a trabajar con profesionales en inmigración podría llegar a dejar a muchas personas con problemas con sus estatus en Canadá, especialmente en este momento donde se combina la finalización de un término académico donde se gradúan miles de estudiantes internacionales en Canadá con una política de la que aun no se han publicado los lineamientos finales y mucho menos entrado en vigencia.
La situación perfecta seria que la iniciativa del gobierno cubriera desde el 30 de enero a los dependientes de PGWP. Pero para aquellos que se quedaron tranquilos dando por hecho que estarían cubiertos por esta iniciativa y no se preocuparon por conseguir un trabajo calificado para poder extender el permiso de sus dependientes, las consecuencias podrían ser devastadoras. ¿Si las parejas no quedan cubiertas, cuanto tiempo se puede demorar el estudiante (solicitante de PGWP) en conseguir un trabajo calificado? La vigencia del permiso de trabajo de la pareja/cónyuge es lo suficientemente larga para dar tiempo a que esto ocurra? ¿O tendrá que extender como visitante y dejar de trabajar? ¿Como va a verse afectada la situación económica de la familia con un ingreso menos? ¿Como se va a ver afectada la solicitud de residencia si el acompañante no puede seguir trabajando?
Como comenté antes, ojalá el 30 veamos que los primeros en la lista de beneficiados son los dependientes de portadores de PGWP. Pero en caso de que no sea así, que estos entren en una segunda o tercera etapa, este es un inconveniente migratorio que podría haberse evitado.
Ser ultra cauteloso en temas migratorios es posiblemente la única forma de tener altas posibilidades de éxito. Ser ultra cauteloso significa ir a la fuente, consultar con expertos, prepararse para el peor escenario y como dijo Francisco Garzón en el último episodio de las 18, preocuparnos más por saber qué hacer con la información que tenemos que por tener información, porque como dijo Marcelo Liberini en un TEDx Bogotá que les sugiero que vean es “hoy vivimos en una sociedad hiper conectada, hiper acelerada, donde parece que todo es actuar, actuar, actuar, donde no hay tiempo para pensar, donde no medimos muchas veces las consecuencias y casi nunca medimos los resultados”
Este es solo un llamado para que dejemos de asumir y dejemos de esperar y confiar en que las cosas pasen y más bien para que hagamos que ellas ocurran. Depender de terceros es correr riesgos, trabajar arduamente hacia un objetivo, conociendo los pasos que se deben dar es la forma mas certera de llegar a una meta.
Claudia Palacio es consultora de Inmigración certificada y miembro activo del College of Immigration and Citizenship Consultants.
