El número de personas que recurren a los bancos de alimentos en todo el país alcanzó un máximo histórico a principios de este año, con la alta inflación y las bajas tasas de asistencia social citadas como factores clave en el aumento.
Un informe anual publicado recientemente indicó que hubo casi 1,5 millones de visitas a los bancos de alimentos en marzo, una cifra que fue un 15% más alta que el número de visitas en el mismo mes del año pasado y un 35% más alto que las visitas en marzo de 2019, antes de la pandemia.
El informe, que analizó los datos de más de 4.750 bancos de alimentos y organizaciones comunitarias, subrayó que el costo disparado de los alimentos y la vivienda, así como la alta inflación y las bajas tasas de asistencia social, han contribuido al aumento del uso de los bancos de alimentos.
Kirstin Beardsley, directora general de los Bancos de Alimentos de Canadá, calificó las cifras de “devastadoras”.
“Lo que estamos viendo es la combinación de los efectos a largo plazo de una red de seguridad social rota, combinada con los efectos de la inflación y los altos costes que llevan a más personas a utilizar los bancos de alimentos que nunca antes en la historia de Canadá”, dijo Beardsley.
Los grupos con ingresos fijos, como los ancianos y las personas con empleo, pero con bajos ingresos, como los estudiantes, se han visto más afectados porque sus cheques no pueden seguir el ritmo de la inflación, dijo Beardsley.
“Tenemos personas como los ancianos, que han podido permitirse vivir, que de repente tienen que recurrir al banco de alimentos por primera vez en su vida porque no les cuadra todo”, dijo Beardsley.
“Y a los estudiantes les ocurre lo mismo, a menudo tienen unos ingresos muy limitados, por lo que cuando los costes suben, de la forma que hemos visto, simplemente no puedes estirar el dólar”.
El informe señala que alrededor de 500 mil personas que acudieron a los bancos de alimentos, aproximadamente un tercio, son niños, que representan alrededor del 20% de la población total del país.
El hambre entre los niños es un problema que puede tener un impacto duradero, dijo Beardsley.
“Este es el futuro de nuestro país, estos son los que van a ser nuestros futuros líderes, científicos, artistas”, dijo. “Cuando vas a la escuela con hambre, no estás aprendiendo, no te estás concentrando, no te estás preparando para prosperar”.
Los Bancos de Alimentos de Canadá señalaron que la inseguridad alimentaria es especialmente grave en el norte de Canadá, y pidieron que se desarrollen enfoques comunitarios en esas zonas para abordar el problema.
El informe sugiere soluciones a corto y largo plazo, como la creación de un piso de ingresos mínimos universales para los canadienses con menores ingresos y la provisión de viviendas más asequibles y de alquiler asistido.
También sugiere la necesidad de reformar el seguro de empleo y los programas de prestaciones a los trabajadores de Canadá.
