Por Oscar Vigil
TORONTO. La mitad de los invitados llegó puntual a la cita. Ni la fuerte tormenta ni el frío intenso que la tarde del lunes 15 de enero abatía Toronto doblegaron la voluntad de participar en una reunión que presagiaba buenos resultados… aunque, a decir verdad, las inclemencias del tiempo invitaban más a dirigirse a casa a degustar una buena taza de café.
La invitación había sido girada con dos semanas de anticipación. Una mesa redonda “para tener una discusión sobre cómo Julie, como su representante federal, puede representar mejor a las comunidades hispano / latinoamericanas, cuáles son las prioridades clave para las comunidades y, en general, cómo puede ayudar”.
La primera reacción, automática, fue revisar el calendario electoral. Pero todo muy bien, fue una invitación política en un año que no hay elecciones, algo inédito si se tiene en cuenta que la mayoría de políticos buscan y se reúnen con a las comunidades étnicas únicamente en los periodos electorales.
Julie Dzerowicz, la representante federal de la zona de Davenport, en Toronto, dio la bienvenida a cada uno de los invitados. Hija de madre mexicana y de padre polaco, saludó y conversó en español, ese idioma que muy poco se habla en los pasillos de Parliament Hill.
De inmediato, la anfitriona marcó la cancha: Quiero saber cuáles son las necesidades de la comunidad hispana, ver en qué puedo ayudar a la comunidad, saber en qué podemos trabajar conjuntamente.
Las respuestas no se hicieron esperar, pero abarcaron un amplio abanico propio de una comunidad con vastas necesidades: la unificación de la comunidad, la deserción escolar, los indocumentados, la eliminación de los estados de protección a los latinoamericanos en los Estados Unidos, las casas de retiro para los seniors, la política exterior de Canadá hacia los países de América Latina y la participación cívica y política de la comunidad hispana en Canadá, entre otros temas, salieron al ruedo.
Julie habló sobre lo que ha estado haciendo en algunos de estos temas, y sobre lo que se puede hacer si la comunidad considera que son los temas claves por trabajar.
Uno de los temas que más le llamó la atención, por su importancia para el futuro, fue el de la educación a nivel secundario, área en la cual, explicó, el gobierno federal puede hacer sus aportes a pesar de que esta es un área que corresponde directamente al gobierno provincial.
El tema migratorio fue otro de los privilegiados, y aquí ofreció sus buenos oficios para ayudar desde situaciones individuales, con necesidades específicas, hasta problemáticas más globales y complejas como el tema de los aproximadamente 500 mil indocumentados que viven en el país, y de los cuales un porcentaje alto corresponde a la comunidad latina.
Explicó que personalmente ha estado involucrada en la búsqueda de soluciones a esta problemática desde que inició sus funciones como Parlamentaria Federal, y se comprometió a trabajar más de lleno el tema en conjunto con los sectores interesados de la comunidad. Aquí se le recordó que hace aproximadamente 12 años se creó una coalición de organizaciones comunitarias que buscaron un proceso de regularización de los indocumentados, y que estaba a punto de lograrse cuando se dio un cambio de gobierno, y acordó aunar esfuerzos con estas organizaciones para buscar soluciones nuevamente.
En relación con el tema de los adultos mayores, explicó que recientemente el gobierno federal transfirió 2.3 billones de dólares a la provincia de Ontario para construir vivienda asequible, e indicó que ese puede ser el camino para concretar el tan deseado proyecto de diversas organizaciones de crear un centro de retiro para seniors de habla hispana.
La MP abundó también sobre la necesidad de la participación política de las comunidades latinoamericanas en los diversos niveles de gobierno del país, y motivó a los asistentes a que se involucraran más en los procesos de tomas de decisiones que actualmente están en vigencia. Julie será una de las principales ponentes durante el programa School4Civic para la comunidad hispana que varias organizaciones comunitarias y académicas van a iniciar en el mes de febrero en Toronto.
Dos horas transcurrieron fluidamente, de forma muy fructífera, en un intercambio de ideas que, si bien por momentos fue muy directo y claro, nunca se salió del cauce de la búsqueda del trabajo conjunto.
Al final, la MP de origen hispano resumió sus compromisos con los asistentes y con la comunidad, quienes, aseguró, pueden contar con ella como una de sus aliadas, teniendo muy en cuenta que es la única MP en la provincia de Ontario que efectivamente puede representar a la comunidad en el parlamento federal desde una perspectiva eminentemente étnica.
Mientras, afuera, amainaba la tormenta.
