Rodrigo Díaz M.
El Sindicato Canadiense de Empleados Públicos anunció que el 93% de sus 55 mil miembros votó a favor de la acción laboral, poniéndolos en una posición de huelga legal a partir del 30 de septiembre.
El sindicato dice que, aunque tiene la intención de seguir negociando con el gobierno de Ontario y espera evitar una huelga, sus miembros están preocupados por los recientes cambios en el sistema educativo de la provincia.
Las medidas incluyen aumentos número de alumnos por sección de clases, cambios hacia modelos de aprendizaje online y una reducción gradual del número de profesores contratados a tiempo completo.
Los cambios fueron implementados el año pasado por los conservadores progresistas bajo el premier de Ontario, Doug Ford.
El presidente de la unidad de negociación del Sindicato Canadiense de Empleados Públicos (CUPE, por sus siglas en inglés) dice que los miembros están dispuestos a abandonar el trabajo para oponerse a lo que consideran recortes que comprometerán la calidad de la educación en las escuelas de Ontario.
El Ministro de Educación, Stephen Lecce, dijo en una declaración que a medida que avanza el año escolar, es importante que los padres, estudiantes y educadores tengan previsibilidad ante los cambios.
“Seguimos pidiendo a todas las partes que lleguen a un acuerdo lo antes posible para proporcionar previsibilidad y confianza a los padres, estudiantes y educadores por igual, nuestros estudiantes no merecen menos”, dijo.
“Nuestro gobierno continuará negociando de buena fe para llegar a un acuerdo que asegure que los estudiantes permanezcan en las aulas”.