Rodrigo Díaz M.
Tras 36 horas de conversaciones, los negociadores acordaron normas sobre la inteligencia artificial (IA) en sistemas como el ChatGPT y el reconocimiento facial.
El Parlamento Europeo votará las propuestas de ley sobre IA a principios del año que viene, pero la legislación no entrará en vigor hasta, al menos, el 2025.
Estados Unidos, Reino Unido y China se también se están preparando para publicar sus propias directrices relacionadas con la regulación de la IA.
Las propuestas incluyen salvaguardias sobre el uso de la IA en la UE, así como limitaciones a su adopción por las fuerzas del orden.
Los consumidores tendrían derecho a presentar denuncias y podrían imponerse multas en caso de infracción.
El comisario europeo Thierry Breton calificó los planes de “históricos”, afirmando que establecían “normas claras para el uso de la IA”. También añadió que era “mucho más que un reglamento: es una plataforma de lanzamiento para que las nuevas empresas y los investigadores de la UE lideren la carrera mundial de la IA”.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que la Ley de IA contribuirá al desarrollo de una tecnología que no ponga en peligro la seguridad y los derechos de las personas.
En una publicación en las redes sociales, afirmó que se trata de un “marco jurídico único para el desarrollo de una IA en la que se pueda confiar”.
El Parlamento Europeo define la IA como el software que puede “para un conjunto dado de objetivos definidos por el ser humano, generar resultados tales como contenidos, predicciones, recomendaciones o decisiones que influyen en los entornos con los que interactúan”.
ChatGPT y DALL-E son ejemplos de lo que se denomina IA “generativa”. Estos programas aprenden de grandes cantidades de datos, como textos e imágenes en línea, para generar nuevos contenidos que parecen hechos por un ser humano.
Los llamados “chatbots”, como ChatGPT, pueden mantener conversaciones de texto. Otros programas de IA, como DALL-E, pueden crear imágenes a partir de simples instrucciones de texto.