Por Raúl A. Pinto
El nuevo gobierno Conservador Progresista de Ontario anunció este martes el inicio de reformas importantes a la asistencia social, reduciendo un aumento ya planificado en las tasas de apoyo a las personas con menores ingresos, y cancelando el programa piloto que proporcionaba pagos mensuales a personas de bajos ingresos en ciertas comunidades de la provincia.
En conferencia de prensa la flamante Ministra de Servicios Sociales Lisa MacLeod dijo que el gobierno trabajaría y presentaría un plan dentro de 100 días para revisar lo que llamó “un sistema de mosaico inconexo” dejado por el anterior gobierno, a cargo del partido Liberal.
“Los liberales gastaron dinero que la provincia no tenía en planes que en realidad hacen poco o nada para romper el ciclo de la pobreza” dijo MacLeod.
Como primera medida se anunció la cancelación del plan del gobierno anterior para aumentar el Programa de Apoyo a la Discapacidad de Ontario (Ontario Disability Support Program) y el aumento de un tres por ciento anual para los montos entregados en el plan de asistencia social Ontario Works, dejándolo en 1,5%. MacLeod señaló que esta movida por parte del gobierno tiene “motivos compasivos” y busca “restaurar la dignidad de los habitantes de Ontario”.
“Déjenme ser clara en esto: el mejor programa social que puede haber es trabajar, para aquellos que pueden conseguir empleo”, dijo, diciendo además que “trabajaré con mis colegas para garantizar la capacidad de integrar a las personas a la fuerza de trabajo donde puedan y asegurarnos de que mantengan más dinero en sus bolsillos”.
La ministro no especificó cuánto dinero costaría el cambio, argumentando que “esta decisión no es sobre ahorrar dinero, sino la de arreglar un sistema roto”.
CP24 dijo que el anuncio fue criticado por, entre otros, el líder del Partido Verde, Mike Schreiner, quien dijo que las tasas de asistencia anuales eran ya demasiado bajas, incluso con el aumento que habían prometido los liberales en su campaña.
“Ciertamente parecen más interesados en destruir cosas que en construir cosas”, dijo.
El gobierno también anunció el fin del proyecto piloto de dar un ingreso básico en Ontario, el cual proporcionó pagos de más de 15 mil dólares para solteros y 24 mil dólares para casados al año a 4 mil personas de bajos ingresos en comunidades como Hamilton, Brantford, Thunder Bay y Lindsay.
Al ser consultada sobre cómo el gobierno había determinado que este plan no era efectivo antes de que terminara, MacLeod dijo que el plan “no estaba haciendo lo que se pretende y nos costaba bastante caro”.