Rodrigo Díaz M.
Con el fin de reforzar la plantilla de los hospitales de Ontario, el gobierno Ford tiene previsto promulgar nuevas leyes que permitan a los trabajadores sanitarios de otras provincias canadienses empezar a ejercer inmediatamente en Ontario.
Según el gobierno, las nuevas normas “de pleno derecho” permitirán a los trabajadores sanitarios registrados en otras jurisdicciones canadienses ejercer inmediatamente en Ontario sin tener que inscribirse en un colegio regulador provincial.
“Necesitamos el mayor número posible de personas”, dijo el premier Ford. “Les recibimos con los brazos abiertos”.
Aunque el gobierno de Ford dijo que el modelo de registro portátil sería el primero de este tipo en Canadá, el gobierno ofreció pocos detalles sobre cómo funcionaría el plan en la práctica.
El Colegio de Enfermeras de la provincia, por ejemplo, afirma que el registro es un “requisito legal” para cualquiera que desee ejercer la enfermería en Ontario, un requisito que el premier sugirió que se revisaría.
“Llegas aquí con tus credenciales y te encontraremos un trabajo inmediatamente”, dijo Ford en una rueda de prensa en Windsor. “No tendrás que pasar por ningún trámite burocrático”.
El gobierno dijo que los trabajadores sanitarios de fuera de la provincia sólo serían elegibles y estarían autorizados a trabajar en Ontario “si han prestado una asistencia sanitaria segura, competente y ética en su provincia o territorio de origen”, pero no dio a conocer los detalles de quién se encargaría de investigar los antecedentes de cada trabajador sanitario.
La ley también permitiría redistribuir fácilmente a los trabajadores de todo el sistema sanitario cuando la provincia experimente un aumento de la demanda y de los tiempos de espera en los servicios de urgencias.
El gobierno dijo que la ley “aumentaría los niveles de dotación de personal a corto plazo” al permitir que enfermeras, paramédicos y terapeutas respiratorios trabajen fuera de sus responsabilidades o entornos habituales “siempre que tengan los conocimientos, la habilidad y el juicio para hacerlo”.
“Esto proporcionará a los hospitales y otros entornos más flexibilidad para garantizar que los profesionales sanitarios cubren las funciones más demandadas en el momento adecuado”, señaló el Ontario Health en un comunicado de prensa. El anuncio del gobierno no ofrece detalles sobre cómo funcionará en la práctica la ley de redistribución, o si se amplía el ámbito de la práctica individual para permitir que enfermeras y otros trabajadores laboren fuera de sus departamentos habituales.