Por Raúl A. Pinto
Un suburbio de Montreal, en la provincia de Quebec, ha adoptado una ordenanza municipal que prohíbe fumar en lugares públicos. Esto, se cree, es un hecho inédito en Canadá.
El consejo municipal del área de Hampstead, ubicada entre ocho y diez kilómetros del centro de esa ciudad, adoptó la legislación el pasado lunes 19 por la noche con una votación de cinco contra dos.
Esta prohibición obliga a quienes fuman tabaco o marihuana a no hacerlo en propiedades municipales, incluidas aceras, o veredas 0y calles. La medida debería entrar en efecto dentro de una semana más o menos.
La Sociedad Canadiense del Cáncer aplaudió la ordenanza, comentando a principios de este mes que Hampstead, Que., se convertiría en el primer municipio del país en prohibir fumar en público si se promulgaba la ordenanza. Algunos medios locales indicaban que una ley similar se había aplicado en Kentsville, Nova Scotia, aunque no está plenamente confirmado.
El estatuto no prohíbe los cigarrillos electrónicos ni fumar en automóviles en una ciudad con 7,000 residentes.
El alcalde de Hampstead, William Steinberg dijo que la ley protegería la salud de las personas y enviaría un fuerte mensaje antitabaco.
Oficiales de seguridad pública se encargarán de reforzar la medida, con multas que oscilarían entre los $250 y los $750 dólares para personas que no cumplan la medida por primera vez, y $500 a $1500 dólares para reincidentes.