Rodrigo Díaz M.
Mientras los pilotos se recuperan de las inmovilizaciones en tierra sufridas en todo el mundo a causa de la pandemia del COVID-19, los dirigentes del sector de las aerolíneas dijeron que hay varios costos que probablemente harán subir aún más el precio de los billetes.
Parte de ello procede de la inflación mundial, un problema constante desde que comenzó la pandemia. Los costos del combustible para aviones, aproximadamente un tercio de todos los gastos de las aerolíneas, siguen siendo elevados. Mientras tanto, la presión mundial para que el sector de la aviación se descarbonice hace que cada vez más compañías luchen por la escasa cantidad del llamado combustible de aviación sostenible, o SAF, disponible en el mercado.
“Las aerolíneas seguirán haciendo todo lo posible por mantener los costes bajo control en beneficio de los consumidores”, declaró Willie Walsh, director general de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional. “Pero creo que no es realista esperar que las aerolíneas puedan seguir absorbiendo todos los costos.No es algo que nos guste hacer, pero es algo que tenemos que hacer”.
También presiona al sector una resaca pandémica en la producción de aviones, dicen. Los transportistas mantienen en vuelo durante más tiempo aviones más viejos que queman más combustible. Tampoco hay suficientes aviones nuevos para ampliar las rutas y aumentar la oferta para bajar los precios globales.
Esta advertencia se produce cuando la IATA calcula que los ingresos de las aerolíneas alcanzarán casi un billón de dólares en el 2024, una cifra récord. Este año habrá casi cinco billones de viajeros en los aviones, y los gastos totales de las compañías alcanzarán los 936 billones de dólares, otro récord.
Pero también se espera que los beneficios del sector sean de casi 60 billones de dólares este año.
En concreto, Emirates, uno de los principales motores de la economía de Dubai, obtuvo unos beneficios récord de 4.7 billones de dólares en el 2023, con unos ingresos de 33 billones.
Los resultados de Emirates coinciden con los de su base, el Aeropuerto Internacional de Dubai. El aeropuerto más transitado del mundo por viajeros internacionales tuvo 86,9 millones de pasajeros el año pasado, superando las cifras del 2019 justo antes de que la pandemia paralizara la aviación mundial.
El aeropuerto planea ahora trasladarse en los próximos 10 años al segundo aeródromo de la ciudad-estado, situado en el desierto meridional, en un proyecto valorado en casi 35 billones de dólares.