Desde comentarios acerca del derecho de portar armas hasta sus políticas acerca de si dejar entrar o no a los inmigrantes, particularmente los musulmanes a estados Unidos, esta carrera electoral ha sido de las más vistas en décadas.
El gigante empresario ha sido acusado por racismo e instigar violencia contra las minorías en Estados Unidos.
A pesar de esto el candidato se convirtió en uno de los favoritos para representar el partido de los republicanos.
En el momento su campaña planea invertir $10 millones en comerciales que saldrán al aire en la próxima semana, ya que el dinero no es un límite para el magante norteamericano.
Sin embargo, los $10 millones de Trump no son mucho comparados con los $77 millones que los medios han reportado que invirtió Hilary en publicidad para televisión y radio.
Trump finalmente habló en la radio a comienzos de este mes, con un aviso enfocado en la inmigración. Sin embargo el magnate solo ha invertido cerca de $5 millones en publicidad para radio.
Clinton, por otro lado, ha invertido $9,2 millones en tiempo al aire esta semana.
Esta nueva inversión viene luego de haberse enterado de que la popularidad de Trump está subiendo como espuma.
El vocero de la campaña política de Trump, Jason Miller, ha dicho en un comunicado que el billonario y su “mensaje positivo acerca de la economía ha podido atraer una audiencia nacional y las personas se han desplazado hacia las mesas de votación”.
Clinton por su parte pasará esta semana en actividades para recaudar fondos de Hamptons, en Long Island, New York.
Se espera que el lunes aparezca el próximo aviso publicitario de Trump en las campañas de elecciones generales.
Este aviso se enfocará en el ángulo económico, que parece le podría ganar algunos votos adicionales.
“En la América de Donar Trump, las familias obtendrán mejores impuestos. Millones de empleos serán creados y los salarios subirán”, afirma el vocero de Trump.
Los analistas afirman sin embargo, que ni los planes de Trump ni los de Hilary tendrán impacto alguno en la economía del país y en la clase media.
