Rodrigo Díaz M.
La estatua de uno de los arquitectos del sistema de “residencias” de Canadá fue derribada ayer por la tarde tras una manifestación en el centro de la ciudad para recordar a los 215 niños indígenas cuyos restos fueron encontrados enterrados en British Columbia.
Cientos de personas se reunieron frente a la estatua de Egerton Ryerson horas antes en protesta. Los estudiantes y el profesorado renovaron su petición para remover la estatua y del cambio de nombre de la universidad por el papel de Ryerson en la creación del sistema de escuelas residenciales, que pretendía convertir y asimilar a los niños indígenas a la cultura canadiense y les hizo sufrir abusos físicos y sexuales.
Aún se desconoce quién fue el responsable de derribar la estatua.
La semana pasada, la estatua y sus alrededores fueron rociados con grafitis tras el descubrimiento de los restos humanos de unos 215 niños en las inmediaciones de un edificio que solía una de las decenas de escuelas residenciales ubicadas en British Columbia. También se colocaron delante de la estatua zapatos de niños, que representan a las víctimas.
Estudiantes y profesores cambiaron sus firmas email de Ryerson a “X University” para presionar por los cambios.
Antes las protestas, Sam Howden, uno de los organizadores de la iniciativa X University y miembro de la Asociación de Estudiantes Indígenas de la universidad, dijo que el evento permite a la comunidad tener un espacio y llorar juntos.
“Espero que esto continúe”, dijo Howden. “Me gustaría que esto fuera algo sostenible donde veamos un cambio a nivel institucional: cambiar el nombre, remover la estatua, y tener una conversación más amplia sobre la violencia colonial y la supremacía blanca en este país y empezar a suprimir esos mecanismos”.
Howden dijo que lo que se hizo a la estatua no fue vandalismo.
“No fue un acto criminal, fue para llamar la atención sobre la violencia que mucha gente ha sufrido por culpa de Egerton Ryerson”.
En un comunicado emitido antes de la manifestación, la Universidad Ryerson dijo que el grupo de trabajo que creó para examinar el legado de Ryerson se compromete a entregar un informe final antes del semestre de otoño.
En un tuit horas antes de que la estatua fuera derribada, la policía de Toronto declaró: “Aunque entendemos que los recientes acontecimientos han tenido un impacto traumático, no podemos tolerar los actos de vandalismo o de violencia. Los oficiales estarán en la escena para garantizar la seguridad de todos los involucrados e investigarán y ejecutarán acciones según sea necesario”.
