Rodrigo Díaz M.
Los residentes de Mississauga y Brampton, así como del resto de Ontario, volverán a estar sometidos a una orden de permanencia en el hogar por parte del gobierno provincial. La orden de emergencia entrará en vigor mañana.
Esta vez, sin embargo, no podrán comprar artículos no esenciales en lugares como Walmart y Costco, ya que las secciones que venden ropa, juguetes, cosméticos, productos electrónicos y otros artículos no considerados de primera necesidad estarán fuera del alcance de los clientes.
Además, premier de Ontario, Doug Ford, ha anunciado que se desplegarán unidades móviles en las zonas más afectadas para suministrar vacunas a los lugares de trabajo esenciales y a las comunidades más afectadas por el virus.
El gobierno también ha dicho que los profesores en las comunidades donde se han detectado más casos de COVID-19 en la provincia, como Brampton y Mississauga, también podrán recibir la vacuna y, con el tiempo, se extenderá al resto de la provincia.
Las medidas se producen en un momento en que los casos de COVID-19 en todo Ontario siguen aumentando y las unidades de cuidados intensivos de los hospitales se acercan a su máximo capacidad. Las restricciones serán similares a las que experimentó Ontario en enero, cuando se cerraron la mayoría de las tiendas y sólo se permitió la venta por pedido.
Asimismo, se permitirá que sigan funcionando los supermercados y centros de distribución de muchas zonas de Ontario.
El anuncio de hoy también pedía a los residentes de Ontario que no viajaran fuera de sus ciudades y pueblos, pero el primer ministro no llegó a emitir la prohibición de viajar que algunos habían pedido para frenar la propagación del virus.