Rodrigo Díaz M.
El sitio web de análisis GasBuddy advierte de que, aunque los precios de la gasolina han bajado en la última semana, las recientes decisiones de recortar el suministro de petróleo podrían presionar al alza los precios.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó el domingo recortes adicionales de producción, mientras que Arabia Saudí está yendo más allá y recortando la producción de julio.
Como resultado, es probable que los precios del petróleo se vean presionados al alza, ya que los suministros mundiales, que se han mantenido ajustados, prometen volverse aún más ajustados.
Los precios de la gasolina han bajado desde los máximos históricos del año pasado, cuando la inflación era abrasadora y había una demanda reprimida tras dos años de restricciones contra el COVID-19.
Este año, sin embargo, la demanda ha sido menor, lo que ha provocado que la menor oferta no incremente los precios.
El precio promedio de la gasolina en Canadá ronda actualmente los 1,60 dólares el litro, unos 50 céntimos menos que los precios durante el 2022. Sin embargo, los precios siguen estando por encima de la media observada antes de la llegada de la inflación, que no llegó a superar los 1,45 dólares por litro.
No es una vuelta completa a la normalidad, parte de la razón por la que los precios no han repuntado mucho este año es simplemente por la falta de una vuelta al consumo normal.
En cuanto a lo que la gente en Canadá puede esperar durante el verano, se calculan que los precios podrían estaré entre los 1,45 y 1,80 dólares el litro.
Arabia Saudí anunció que recortará su producción de petróleo en un millón de barriles diarios a partir de julio, mientras el crudo Brent, de referencia internacional, caía a 75 dólares por barril en los últimos días. El país espera impulsar el precio a 80,90 dólares por barril, del que depende su economía.
Mientras tanto, los productores de la OPEP acordaron recientemente prorrogar hasta el año que viene los recortes de producción anteriores.
Aunque la demanda ha sido inferior a la oferta, un estímulo excesivo de la economía podría disparar los precios debido a la menor oferta.
Afortunadamente, el riesgo de que esto ocurra este año es bastante bajo, ya que se espera que las tasas de interés se mantengan estables o sigan subiendo este año. Los efectos de la reducción de la oferta podrían notarse el año que viene si se relajan las políticas monetarias.
