Rodrigo Díaz M.
Los residentes de Búfalo se agolpaban alrededor de estufas, buscaban coches enterrados en la nieve y más víctimas ayer por noche, después de que 28 personas murieran en una de las peores catástrofes meteorológicas que ha azotado el oeste de Nueva York.
El resto de Estados Unidos también se tambaleaba por la feroz tormenta invernal, con al menos otras dos docenas de muertes registradas en otras partes del país.
Hasta 23 centímetros más de nieve cayeron en algunas zonas del oeste de Nueva York hasta hoy por la mañana, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Algunas personas se quedaron atrapadas en sus coches durante más de dos días.
El presidente Joe Biden dijo que sus oraciones estaban con las familias de las víctimas, y ofreció ayuda federal el lunes al estado duramente golpeado.
Las personas que perdieron la vida en los alrededores de Búfalo fueron encontradas en coches, casas y bancos de nieve. Algunos murieron mientras paleaban la nieve, otros cuando los equipos de emergencia no pudieron responder a tiempo.
Los científicos dicen que la crisis del cambio climático puede haber contribuido a la intensidad de la tormenta. Eso se debe a que la atmósfera puede transportar más vapor de agua, que actúa como combustible.
La ventisca fie especialmente severa el viernes y el sábado. Con muchas tiendas en el área de Búfalo cerradas y prohibiciones de conducir, algunas personas suplicaron en las redes sociales donaciones de alimentos y pañales.
El alivio llegará a finales de esta semana, ya que las previsiones indican que las temperaturas subirán lentamente.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, recorrió el lunes las secuelas en Búfalo, su ciudad natal, y calificó la ventisca de “una para la historia”. Casi todos los camiones de bomberos de la ciudad se quedaron varados el sábado, dijo.
Hochul señaló que la tormenta se produjo poco más de un mes después de que la región se viera inundada por otra nevada “histórica”. Entre las dos tormentas, los totales de nieve caída no están muy lejos de los 242 centímetros que la zona suele ver en toda una temporada de invierno.
Prácticamente en todo el país se registraron muertes relacionadas con la tormenta, entre ellas al menos ocho fallecidos en accidentes en Misuri, Kansas y Kentucky. Una mujer cayó por el hielo de un río de Wisconsin y se produjo un incendio mortal en un campamento de personas sin hogar de Kansas.