Ontario busca vincular el acceso a la licencia de conducir con la residencia, el estatus migratorio y la autorización legal para trabajar en Canadá.
En un anuncio hecho por el Ministro Asociado de Transportes, Hardeep Grewal, el gobierno de Ontario endurecería los requisitos para obtener o renovar el documento, en uno de los cambios más significativos en materia de transporte de los últimos años. Según el gobierno, la medida busca fortalecer la seguridad vial, proteger a las familias y garantizar que solo conductores con presencia legal en el país puedan acceder a una licencia.
A través del proyecto de ley Fighting Delays, Building Faster Act (Bill 60), presentado el 23 de octubre, se introducen modificaciones a la Highway Traffic Act que otorgan al Ministerio de Transporte la facultad de verificar la visa, el permiso de trabajo o la residencia de cada solicitante antes de emitir o renovar una licencia.
Además, los visitantes ya no podrán obtener licencias comerciales —como las clases A o D—, y se pondrá fin al reconocimiento automático de licencias extranjeras provenientes de países sin acuerdos de reciprocidad. El proyecto también exigirá al menos un año de experiencia conduciendo en Canadá antes de poder solicitar una licencia comercial de clase A, requerida para operar camiones pesados.
El gobierno provincial sostiene que los cambios buscan prevenir fraudes, mejorar la capacitación de los conductores y proteger empleos en el sector del transporte. No obstante, representantes de la industria advierten que las nuevas reglas podrían agravar la escasez de camioneros en la provincia.
Si el proyecto es aprobado por la Asamblea Legislativa y recibe la sanción real, las nuevas disposiciones podrían entrar en vigor a comienzos de 2026. Mientras tanto, se recomienda a los solicitantes y empleadores prepararse para un proceso más estricto de verificación de estatus migratorio y residencia.











