Rodrigo Díaz M.
En una victoria para la conciliación de la vida laboral y familiar, ya ha entrado en vigor una nueva ley en Ontario que obliga a muchas empresas a elaborar políticas sobre la desconexión de los empleados fuera del horario laboral.
A partir del 2 de junio, las empresas de Ontario con 25 o más empleados ya deben de tener una política escrita respecto a la desconexión fuera del horario laboral. La nueva ley forma parte de la Ley de Trabajo para los Trabajadores de los Conservadores Progresistas de Ontario, aprobada a finales de 2021 y es la primera ley de este tipo en Canadá.
“‘Desconectarse del trabajo’ significa no participar en las comunicaciones relacionadas con el trabajo, incluidos los correos electrónicos, las llamadas telefónicas, las videollamadas o el envío o la revisión de otros mensajes, para estar libre del desempeño del trabajo”, se estipula en la legislación del 2021.
El ministro de trabajo de Ontario, Monte McNaughton, declaró anteriormente que la ley “se creó en respuesta a las líneas cada vez más borrosas entre el trabajo y el hogar” causadas por la pandemia del COVID-19.
Las nuevas normas laborales de Ontario deben aplicarse a todos los empleados, incluidos los directivos y ejecutivos. Las políticas de la empresa deben definir claramente las expectativas, si las hay, sobre la comunicación fuera del horario de trabajo.
A partir de marzo de 2023, todas las empresas con 25 o más empleados deberán tener una política en esta materia ya activa y funcionando para sus trabajadores.
Ontario es la única provincia que cuenta con una ley de este tipo. Quebec y el gobierno federal también han estudiado la idea, pero todavía no han presentado ninguna ley. Este tipo de leyes se introdujeron por primera vez en Francia, y desde entonces sólo han sido adoptadas por un pequeño puñado de países, entre ellos Italia y Eslovaquia.
Los críticos, sin embargo, dicen que la legislación de Ontario se queda corta y que no aborda lo que muchos trabajadores realmente quieren y necesitan.
Argumentan que lo que realmente debería considerarse es la flexibilidad en el lugar de trabajo, que la ley es poco práctica y que carece de detalles clave como la aplicación y las sanciones.
Aun así, los expertos en salud mental afirman que este tipo de normativas son un paso en la dirección correcta para mantener el equilibrio entre la vida laboral y personal y desconectar a los trabajadores del mundo digital y laboral.