Rodrigo Díaz M.
Semanas o días antes de morir, la víctima de un inquietante caso de homicidio en el oeste de Toronto, relacionado con productos químicos, fue detenida en el centro comercial Vaughan Mills, junto a su presunto asesino.
Selvin Edgardo Paz Mejía, de 40 años, era un solicitante de asilo que huyó de Honduras hace ocho años para escapar de las amenazas de muerte de una conocida banda criminal, según los expedientes judiciales que resumen su solicitud de asilo.
La investigación sobre su muerte en Toronto comenzó cuando la policía respondió a un control de prueba de vida cerca de Weston Road y Black Creek Drive a finales de junio y encontró restos biológicos y sustancias químicas. Se llamó al lugar a los equipos de respuesta a emergencias especializados en materiales peligrosos.
El servicio de patología forense de Ontario confirmó que los restos eran humanos e identificó posteriormente a Paz Mejía como la víctima. Los registros judiciales sugieren que la policía cree que murió en algún momento entre el 3 de mayo y el 27 de junio.
Mariana Aburto Hernández, de 22 años, está acusada de asesinato en primer grado y de intromisión indebida o indecente en un cadáver. Compareció ante el tribunal el martes pasado por la mañana.
La policía mantiene un hermetismo sobre el caso y quedan muchos interrogantes, incluida la relación entre víctima y acusada, pero los documentos judiciales y los registros de inmigración arrojan algo de luz sobre la vida de la víctima en Honduras, sus años en Toronto y sus últimos días.
Aburto Hernández y Paz Mejía fueron arrestados juntos el 2 de mayo del 2024, por presuntamente robar en las tiendas Saks Fifth Avenue y Nike en Vaughan Mills, según muestran los registros judiciales. Ambos fueron acusados de robo de menos de cinco mil dólares y posesión de bienes obtenidos mediante delito de menos de cinco mil dólares. Paz Mejía también fue acusado de dos cargos de incumplimiento de órdenes de libertad condicional. Los cargos no han sido probados ante el tribunal.
Paz Mejía llegó a Canadá como solicitante de refugio tras huir de las amenazas de muerte de una banda criminal en Honduras hace ocho años, según los registros judiciales que resumen los detalles de su solicitud.
En septiembre del 2015, poco después de que abriera un cibercafé en la ciudad de San Pedro Sula, en el noroeste de Honduras, donde nació, miembros de la conocida pandilla Mara 18 se presentaron y lo amenazaron con armas de fuego, diciendo que tendría que hacer pagos semanales para mantener a su familia y su negocio a salvo, dijo a las autoridades.
Paz Mejía denunció ese incidente y otros a la policía local, pero las amenazas no hicieron más que aumentar, se detalla en su demanda. Los miembros de la banda amenazaron con matarlo a él y a su familia. También le golpearon y destruyeron algunos de sus ordenadores, según los documentos judiciales.
Tras presentar una cuarta denuncia a la policía, Paz Mejía se escondió y huyó de Honduras. Llegó a Canadá a través de Estados Unidos y solicitó el estatuto de refugiado en diciembre del 2016.
La Junta de Inmigración y Refugiados de Canadá denegó su solicitud, alegando problemas de credibilidad. Un panel de apelación discrepó posteriormente de esa caracterización, considerándolo veraz, pero confirmó la decisión por otros motivos y desestimó su recurso.
Paz Mejía iba a ser deportado el 29 de marzo del 2023, pero a falta de un día, un juez le concedió una suspensión que le permitía permanecer en Canadá mientras los tribunales estudiaban una solicitud de permiso y revisión judicial. Ese caso seguía en los tribunales esta primavera, cuando Paz Mejía fue asesinado.
La policía no ha dicho quién solicitó el control de prueba de vida que les llevó al apartamento situado cerca de Weston Road y Black Creek Drive el 27 de junio, donde se descubrieron “restos biológicos”. El equipo Químico, Biológico, Radiológico y Nuclear de la Policía de Toronto y la Unidad de Materiales Peligrosos de los Servicios de Bomberos de Toronto acudieron al lugar para garantizar que los productos químicos pudieran retirarse de forma segura.
La pareja también tenía otros cargos penales por conducir bajo los efectos del alcohol. Aburto Hernández fue detenida en julio del 2023 en Tiny Township y acusada de conducir bajo los efectos del alcohol y de conducción peligrosa de un vehículo. Ninguno de los cargos contra ella ha sido probado en los tribunales.
Paz Mejía fue detenido en julio del 2020 y acusado de conducción bajo los efectos del alcohol, conducción peligrosa de un vehículo de motor y proferir amenazas de muerte o lesiones corporales. En enero del 2023, se declaró culpable de conducción peligrosa de un vehículo de motor y obtuvo la libertad condicional con dos años de libertad supervisada.
Un juez que examinó su solicitud de refugio dijo más tarde que, dado su diagnóstico de abuso de sustancias y ansiedad, y el hecho de que había buscado tratamiento, una deportación basada únicamente en esos cargos “sería una respuesta desproporcionada.”
Tanya Casco, funcionaria consular de la Embajada de Honduras en Ottawa, dijo que están al tanto del homicidio de un hondureño en Toronto. “Estamos en proceso de ponernos en contacto con la familia y tratar de ayudar en todo lo que podamos”, dijo Casco.