Rodrigo Díaz M.
Al menos 110 personas, en su mayoría ancianos, han sido brutalmente asesinadas por miembros de una banda en la capital haitiana, Puerto Príncipe, según un grupo de derechos humanos.
La Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH) afirmó que el líder de una banda local los había atacado después de que su hijo enfermara y posteriormente muriera.
Al parecer, el jefe de la banda consultó a un sacerdote vudú que culpó a los ancianos de la zona que practicaban “brujería” de la misteriosa enfermedad del niño.
Naciones Unidas ha declarado que el número de personas muertas en Haití en lo que va de año a causa de la espiral de violencia entre bandas ha alcanzado la cifra de cinco mil.
Aunque aún no se han desvelado todos los detalles de la masacre, el jefe de derechos humanos de la ONU, Volker Türk, cifró el lunes en 184 el número de personas asesinadas durante el fin de semana “en actos de violencia orquestados por el líder de una poderosa banda”.
Los asesinatos se produjeron en el barrio capitalino de Cité Soleil.
Según los informes, los miembros de la banda sacaron a decenas de residentes mayores de 60 años de sus casas en la zona de Wharf Jérémie, los acorralaron y luego les dispararon o apuñalaron hasta la muerte con cuchillos y machetes.
Los residentes informaron de que habían visto cuerpos mutilados quemados en las calles.
RNDDH calculó que el viernes murieron 60, mientras que otros 50 fueron acorralados y asesinados el sábado, después de que el hijo del líder de la banda muriera de su enfermedad.
Aunque la RNDDH afirmó que todas las víctimas eran mayores de 60 años, otro grupo de derechos afirmó que también habían sido asesinadas algunas personas más jóvenes que habían intentado proteger a los ancianos.
Los medios de comunicación locales afirmaron que se había escogido a ancianos que se creía que practicaban el vudú porque al jefe de la banda le habían dicho que la enfermedad de su hijo había sido causada por ellos.
Grupos de derechos humanos afirmaron que el hombre que había ordenado los homicidios era Monel Felix, también conocido como Mikano. Se sabe que Mikano controla el muelle Jérémie, una zona estratégica del puerto de la capital.