Rodrigo Díaz M.
Ucrania está solicitando formalmente el ingreso por la vía rápida en la alianza militar de la OTAN, pero los expertos afirman que es probable que el país tarde años en convertirse en miembro.
La OTAN, Organización del Tratado del Atlántico Norte, es una alianza política y militar de países de Europa y Norteamérica, formada poco después de la segunda guerra mundial, que mantuvo en jaque al Pacto de Varsovia de la Unión Soviética durante la Guerra Fría. Desde el colapso soviético ha participado en operaciones militares en diversas partes del mundo, como los Balcanes y Afganistán. En la actualidad cuenta con 30 miembros, entre ellos Canadá, Estados Unidos, Alemania, Francia, Grecia y, más recientemente, Polonia.
Tras la invasión rusa de Ucrania en febrero, Finlandia y Suecia comunicaron simultáneamente su intención de unirse a la OTAN, pero aún no han sido invitados oficialmente a convertirse en aliados.
La OTAN proporciona a los países una defensa y una seguridad colectivas y les permite cooperar más rápidamente que si no hubiera alianza.
“Estamos dando nuestro paso decisivo al firmar la solicitud de Ucrania para la adhesión acelerada a la OTAN”, dijo el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy. “De hecho, ya hemos demostrado la compatibilidad con las normas de la alianza. Confiamos los unos en los otros, nos ayudamos y nos protegemos”.
Todas las decisiones de la OTAN, incluida la de acoger a un nuevo miembro como Ucrania, se toman por consenso, lo que significa que todos los países de la alianza tienen que llegar a un acuerdo.
La expansión conlleva una mayor responsabilidad y, por lo tanto, presenta retos de compatibilidad para las naciones solicitantes.
Se sospecha que, al solicitar el ingreso en la alianza, Ucrania tendrá que enfrentarse a obstáculos con sus vecinos inmediatos, los miembros de la OTAN Hungría y Rumanía, debido a la política de homogeneización cultural de Ucrania, dirigida en gran medida a los rusos. También pueden surgir obstáculos con Polonia, Turquía y Grecia.
Para mantener la credibilidad dentro de la alianza, la OTAN también puede tomarse su tiempo para aprobar la adhesión durante la guerra, que comenzó en febrero.
Si Ucrania entrara en la OTAN, se beneficiaría claramente de esta protección nuclear y si Vladimir Putin disparara un arma nuclear dentro de Ucrania, la OTAN estaría obligada a responder. Si no respondieran, esto socavaría su credibilidad.
Ucrania declaró oficialmente sus aspiraciones de convertirse en miembro de la OTAN en 2008 en la Cumbre de Bucarest, en Rumanía.
Inicialmente la idea era poner a Ucrania en la vía de convertirse en miembro, pero no hubo ningún avance en ese proceso.
Luego, en 2014, cuando Rusia invadió por primera vez Crimea y partes de Donbas, la OTAN apoyó a Ucrania políticamente pero no con tropas.