Rodrigo Díaz M.
Unas 850 personas siguen desaparecidas tras los devastadores incendios forestales de Maui, según ha declarado el alcalde del condado, Richard Bissen.
En contraste, más de 1.200 personas que figuraban en la lista de desaparecidos han sido encontradas a salvo, pero se ha confirmado la muerte de 114 personas hasta el momento.
Las llamas destruyeron la mayor parte de la histórica ciudad de Lahaina, en Maui, y los incendios se consideran ahora el peor desastre natural de la historia del estado de Hawái.
“Nuestras vidas han cambiado para siempre y las cosas no volverán a ser como antes”, dijo Bissen en un vídeo publicado en las redes sociales. “Lo que sí será igual es la forma en que nos cuidamos unos a otros mientras lloramos y atravesamos esto juntos”.
Hasta la fecha, se ha identificado a 27 de los fallecidos y se ha informado a 11 familias.
En los últimos días han empezado a conocerse detalles sobre las víctimas, entre las que se encuentran un músico apasionado y abuelas y padres cariñosos.
Bissen afirmó que, en algunos aspectos, la cifra de 850 desaparecidos era una “noticia positiva”, ya que suponía un descenso con respecto a los más de dos mil que se produjeron tras los incendios.
Pidió a quienes tuvieran seres queridos aún desaparecidos que proporcionaran una muestra de ADN para ayudar en la búsqueda de recuperación.
Según los expertos en la materia, encontrar e identificar a las víctimas podría llevar meses o incluso años, dada la magnitud de la destrucción y el estado en que probablemente se encuentren muchos de los restos.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, viajó con la Primera Dama, Jill Biden, a última hora del lunes para reunirse con las víctimas de los incendios, incluidos los residentes de Lahaina, los equipos de primera intervención y los funcionarios locales.
En un comunicado, el presidente se comprometió a hacer “todo lo que esté en mi poder para ayudar a Maui a recuperarse y reconstruirse de esta tragedia”.
Biden ha sido criticado por los republicanos, que afirman que no ha hecho lo suficiente para hacer frente a la devastación.
Las autoridades locales también han recibido críticas. El jefe de gestión de emergencias de Maui dimitió la semana pasada después de que la agencia recibiera críticas por no activar su sistema de alarma tras el incendio.