A tan solo pocos días de que se reanuden las clases los maestros y el gobierno de Ontario siguen teniendo desacuerdos sobre el plan de regreso a clases provincial.
Rodrigo Díaz M.
Los cuatro principales sindicatos de maestros y trabajadores de la educación de la provincia han anunciado que tomarán medidas legales contra el gobierno de Ontario debido a las preocupaciones de salud y seguridad relacionadas con la reapertura de las escuelas.
En un comunicado de prensa, los sindicatos dijeron que no les ha quedado más remedio que presentar apelaciones formales ante la Junta de Relaciones Laborales de Ontario (OLRB, por sus siglas en inglés). Los sindicatos piden menos alumnos por salón de clases, más espacio para permitir el distanciamiento físico, mejor ventilación y más.
La Association des enseignantes et des enseignants franco-ontariens (AEFO), la Elementary Teachers’ Federation of Ontario (ETFO), la Ontario English Catholic Teachers’ Association (OECTA) y la Ontario Secondary School Teachers’ Federation (OSSTF/FEESO) dijeron que cada una de ellas presentará una apelación ante la OLRB argumentando que el plan para la reapertura de las escuelas de Ontario del ministerio de educación no toma todas las precauciones razonables en cuenta para proteger a los trabajadores.
El comunicado de prensa informa que los representantes de los sindicatos se reunieron con el ministro de trabajo y el jefe de prevención de Ontario el 24 de agosto y plantearon una serie de preocupaciones sobre la seguridad que tendrán cuando vuelvan a las escuelas.
Los sindicatos pidieron que se le ordenara al ministerio de educación que estableciera normas sobre el distanciamiento físico, la cohorte, la ventilación y el transporte. También pidieron al Ministerio de Trabajo que revisara estas órdenes mensualmente, añadiendo que a las juntas escolares se les debería dar más tiempo si fuera necesario para implementar medidas adecuadas de salud y seguridad.
Los miembros de los sindicatos dijeron que, hasta el día de hoy, el ministerio de trabajo “no había cumplido con estas peticiones” y exigieron que se revisen los procedimientos de seguridad para que estén en línea con los implementados en otras jurisdicciones empresariales, especialmente en lo que respecta al distanciamiento físico.
Los representantes de los sindicatos alegan que las medidas actuales del gobierno para las escuelas no siguen los estándares y prácticas en torno a la salud y seguridad en el lugar de trabajo basadas en la “jerarquía de controles” del Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional de los Estados Unidos (NIOSH).
“Las escuelas y las aulas son lugares de trabajo únicos, con más de 30 personas compartiendo pequeños espacios”, dijo el presidente de la ETFO, Sam Hammond, en una declaración.
“Un menor número de estudiantes por salón de clases ayudaría a hacer las escuelas más seguras. ¿Deberían los maestros y trabajadores de la educación no poder esperar al menos los mismos estándares y medidas de precaución que se han puesto en marcha en las tiendas, oficinas y otros espacios en toda la provincia?”.