Un joven de Calgary identificado como S.K. —debido a una orden de no publicación bajo la Youth Criminal Justice Act (YCJA)— recibió una condena de siete años por asesinato en segundo grado, el máximo permitido para un joven bajo esa ley.
La jueza Lisa Silver, de la corte de King’s Bench, impuso cuatro años de internamiento seguidos de tres años de supervisión comunitaria, y otorgó crédito por el tiempo ya pasado en custodia. La pena fue presentada como propuesta conjunta por la fiscalía y la defensa.
El caso comenzó el 6 de junio de 2024, cuando S.K., entonces de 17 años, apuñaló mortalmente a un joven de 16 años con quien solo había interactuado por redes sociales en un intercambio descrito como “hostil”. Según los hechos aceptados por el tribunal, el acusado sorprendió a la víctima cuando caminaba con su pareja, agrediéndola con al menos tres puñaladas, además de exigirle un sudadero de marca BAPE de alto valor, que la víctima entregó. Después de esto, S.K. huyó, se deshizo de su ropa y más tarde alegó falsamente defensa propia antes de admitir su responsabilidad, una vez que fue confrontado con imágenes obtenidas por videovigilancia.
En la sentencia, la jueza destacó que la rehabilitación era posible, señalando que el joven había participado en programas de ayuda, solicitó consejería psicológica y se ofreció como mentor de otros jóvenes internos. La familia de la víctima presentó declaraciones personales, describiendo el dolor continuo que sintieron desde que el homicidio ocurrió. A través de esta resolución, el tribunal busca “equilibrar los objetivos de responsabilidad”, además de ofrecer la protección al público y la rehabilitación que guían el régimen juvenil de justicia penal en Canadá.











