Todos sabemos cómo debe ser Acción de Gracias: una familia sonriente alrededor de una mesa cargada de comida. Sin embargo, la realidad puede ser diferente. Las disputas familiares, los problemas logísticos o económicos pueden hacer que las fiestas sean más estresantes que edificantes.
Es probable que haya leído sobre el poder de la gratitud para cambiar la perspectiva de una persona y aumentar su felicidad. Pero la gratitud no aparece en Acción de Gracias sin avisar. Tiene que invitarla a entrar en su hogar y en su vida.
Una buena manera de empezar es darse cuenta de todas las cosas que tiene, cosas que otras personas pueden estar echando de menos.
Considere estas cinco maneras de cultivar la gratitud este Día de Acción de Gracias:
- Hágase voluntario: Póngase en contacto con el banco de alimentos o el centro de acogida para personas sin hogar de tu localidad para ver cómo puedes ayudar.
- Visite a alguien: Tómese su tiempo para visitar a alguien mayor, enfermo, solo o incluso en la cárcel.
- Entable conversación: En lugar de ignorar a esa persona sin hogar, pregunté algo sobre ella. Pregúntele cómo se llama y de dónde viene. Le sorprenderá lo fácil que puede resultar entablar una conversación.
- Compare situaciones: Conozca partes del mundo donde los niños no sobreviven hasta la edad escolar, por no hablar de la edad en la que nuestros adolescentes nos dan tantos problemas.
- Retribuya: Done una bolsa de ropa usada al centro de acogida de mujeres de su localidad, ayude a recoger alimentos enlatados para la campaña de recogida de alimentos del colegio de sus hijos.
Al tender la mano y aumentar la gratitud, puede que al mismo tiempo haga un nuevo amigo, y eso es algo por lo que estar realmente agradecido.
-News Canada