El gobierno liberal está a punto de recibir recomendaciones que podrían conducir a las reformas más significativas en las leyes laborales de Ontario desde los años noventa.
La remuneración obligatoria por enfermedad, la modificación del umbral de las horas extra, el aumento de las vacaciones mínimas pagadas, la programación anticipada y la facilitación de la adhesión a un sindicato están bajo consideración.
“Estamos desafiando si estas reformas son necesarias o no”, dijo Karl Baldauf, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Ontario. Sus 60.000 miembros emplean a unos dos millones de personas en la provincia.
“Tenemos que asegurarnos de que no están poniendo a las empresas en una posición en la que realmente estarán menos inclinados a contratar o menos inclinados a expandirse como resultado de nuevas y onerosas regulaciones”, dijo Baldauf a los medios.
Baldauf se reunió el lunes con el ministro de Trabajo de Ontario, Kevin Flynn, para pedir al gobierno que no haga cambios sin una sólida evidencia sobre los costos y beneficios.
La premier de Ontario Kathleen Wynne ordenó la revisión de las leyes laborales de la provincia en el 2015, centrándose en el empleo precario y los trabajadores vulnerables.
Se realizan cambios en las leyes laborales de Ontario
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