Hasta ahora no se sabía si alguien podría recaer con el COVID-19 luego de haberse curado del virus.
Rodrigo Díaz M.
Según investigadores de la Universidad de Hong Kong, un hombre de Hong Kong, que se había recuperado del COVID-19, se infectó de nuevo cuatro meses y medio después en el primer caso documentado de reinfección humana.
Los hallazgos indican que la enfermedad, que ha matado a más de 800 mil personas en todo el mundo, puede seguir propagándose entre la población mundial a pesar de la inmunidad que algunas personas podrían presentar.
El hombre de 33 años fue dado de alta de un hospital en abril después de recuperarse del COVID-19, pero volvió a dar positivo tras regresar de España el 15 de agosto.
El paciente parecía estar previamente sano, dijeron los investigadores en el documento, que fue aceptado por la revista médica internacional Clinical Infectious Diseases. Se encontró que había contraído una cepa de coronavirus diferente de la que había contraído anteriormente y que permanecía asintomático para la segunda infección.
“El hallazgo no significa las vacunas sean inútiles”, dijo a Reuters el Dr. Kai-Wang To, uno de los principales autores del artículo. “La inmunidad inducida por la vacunación puede ser diferente de la inducida por la infección natural”, dijo To. “Se tendrá que esperar los resultados de las pruebas de la vacuna para ver si las vacunas son efectivas.”
En China también se han notificado casos de personas dadas de alta de hospitales y que han vuelto a dar positivo por la infección del COVID-19. Sin embargo, en esos casos no estaba claro si habían contraído el virus de nuevo después de la recuperación total, como le sucedió al paciente de Hong Kong, o si todavía tenían el virus en su cuerpo desde la infección inicial.
El número preliminar de pacientes en China que volvieron a dar positivo una vez que fueron dados de alta del hospital fue de 5% a 15%, dijo Wang Guiqiang, especialista en enfermedades infecciosas del grupo de expertos de China para el tratamiento del COVID-19, durante una sesión informativa para la prensa en mayo.
Una explicación fue que el virus todavía existía en los pulmones de los pacientes, pero no se detectó en las muestras tomadas de las partes superiores del tracto respiratorio, dijo. Otras posibles causas eran la baja sensibilidad de las pruebas y la débil inmunidad que podía conducir a resultados positivos persistentes, añadió.
Jeffrey Barrett, experto y consultor del Proyecto del Genoma COVID-19 del Instituto Wellcome Sanger de Gran Bretaña, explicó en comentarios enviados por correo electrónico a Reuters que era muy difícil hacer cualquier inferencia fuerte a partir de una sola observación.
“Dado el número de infecciones mundiales hasta la fecha, ver un caso de reinfección no es tan sorprendente, aunque sea muy raro”, dijo.