Con septiembre llega el esperado (y a veces estresante) regreso a clases. Para muchas familias, este período no solo implica comprar útiles y ajustar horarios, sino también encontrar maneras de mantener la salud, la seguridad y la armonía en casa
Uno de los temas más importantes en el entorno escolar es la prevención de alergias. Los padres cuyos hijos conviven con condiciones como la alergia a los frutos secos o a la leche deben revisar los planes de acción con la escuela y asegurarse de que maestros y cuidadores sepan cómo reaccionar en caso de emergencia. La práctica con el uso de autoinyectores de epinefrina (como el EpiPen) puede dar seguridad tanto a los niños como a los adultos que los rodean.
Recordemos que la preparación es la mejor herramienta para la tranquilidad. En paralelo, el inicio de un nuevo ciclo también trae consigo la necesidad de cuidar la salud financiera de los estudiantes, especialmente aquellos que entran a la universidad o combinan estudios con trabajo. Elaborar un presupuesto, diferenciar entre necesidades y deseos, y dar prioridad al pago de deudas ayuda a evitar problemas a futuro. En Canadá existen aplicaciones y recursos oficiales que pueden apoyar a los jóvenes a organizar sus gastos y a empezar a construir un historial crediticio sólido, lo cual es un pilar fundamental para su independencia.
Por supuesto, la alimentación es clave para que niños y jóvenes se mantengan activos y concentrados. Preparar meriendas nutritivas no tiene por qué ser complicado: frutas de temporada con queso, verduras crujientes con dip, uvas con galletas integrales, o un yogurt con granola y rebanadas de pera pueden ser aliados perfectos. Además de ser fáciles de preparar, estas opciones ofrecen la energía necesaria para rendir tanto en el aula como en actividades extracurriculares.
El regreso a clases es, en definitiva, una oportunidad para fortalecer hábitos saludables en todos los sentidos: desde la seguridad médica y el bienestar económico, hasta la alimentación y el manejo del tiempo en familia. Con organización, creatividad y apoyo mutuo, cada inicio de ciclo puede convertirse en una experiencia positiva y enriquecedora para toda la comunidad.











