Luego de cuatro días de conteos y revisiones, se ha proyectado que Joe Biden será el nuevo presidente de los Estados Unidos de América.
Rodrigo Díaz M.
Joe Biden se convertirá en el presidente número 46 de los Estados Unidos después de conseguir una victoria electoral asombrosamente estrecha sobre el actual presidente, Donald Trump.
La campaña divisiva y amargamente disputada llegó a su fin cuatro días después de la noche de las elecciones, cuando Biden obtuvo victorias decisivas sobre Trump en los estados de Michigan, Wisconsin, Nevada y Pensilvania.
La Associated Press ha proyectado que Biden ganará por lo menos 290 votos electorales de los 270 que necesita para convertirse en presidente.
Biden ha obtenido un histórico 74.857.880 votos con papeletas que aún se están contando en algunas zonas.
Desde el principio de su campaña, Biden se obsesionó con recuperar estos tres estados: Michigan, Pensilvania y Wisconsin, parte del llamado “muro azul”, un conjunto de estados que antes de la victoria de Trump en 2016 habían votado tradicionalmente por los demócratas.
El candidato demócrata superó los 270 votos electorales hoy con una victoria en Pensilvania, según lo proyectado por la Associated Press.
Aún quedan cientos de miles de votos por contar en Pensilvania. Trump, que mantuvo una ventaja sobre Biden el miércoles y el jueves, vio esa ventaja caer el viernes temprano.
Biden ahora lidera por más de 34.458 votos. Los votos contados tardíamente estaban abrumadoramente a favor de Biden.
También superó a Trump en Georgia, un estado en donde se esperaba que Trump ganara, con una ventaja de 7.248 votos. Pero los márgenes son tan estrechos que los funcionarios electorales estatales esperan que haya un recuento.
Trump ha amenazado con exigir un recuento en Wisconsin, y hay informes de que Michigan podría ser el próximo. Un candidato perdedor puede presentar una petición jurada, junto con una tasa de presentación, para un recuento.
Arizona también juega un papel aquí. Hoy, Biden mantiene una ventaja de unos 20.573 votos.
Antes de que se determinara un claro ganador, Trump falsa y prematuramente reclamó la victoria sobre Biden varias veces. Como su camino a la reelección parecía encogerse, Trump lanzó acusaciones infundadas de fraude electoral y amenazó con llevar los resultados al Tribunal Supremo de los Estados Unidos. A continuación, se produjo una oleada de demandas que cuestionaban la validez del recuento de votos. Muchas de ellas han sido rechazadas.
En una declaración poco después del anuncio, Biden dijo que se sentía “honrado de que el pueblo estadounidense haya depositado en mí y en la vicepresidenta electa, Kamala Harris”.
“Frente a obstáculos sin precedentes, un número récord de estadounidenses votó”, escribió. “Demostrando una vez más, que la democracia late profundamente en el corazón de América”.
Biden dijo que, con la campaña terminada, “es hora de dejar atrás la ira y la dura retórica y unirnos como nación”.
En un tuit, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, felicitó a Biden y Harris.
“Nuestros dos países son amigos cercanos, socios y aliados”, escribió. “Compartimos una relación que es única en el escenario mundial. Tengo muchas ganas de trabajar juntos”.
