Por Raúl A Pinto
Luego que el caso del granjero que disparó por la espalda a Colten Boushie cerrara con la absolución del acusado, voces de todos los sectores se levantaron en apoyo a la familia, incluyendo al mismísimo Primer Ministro de Canadá Justin Trudeau, quien habló en contra del sistema judicial del país, comentando en una conferencia de prensa que “Canadá debe abordar los problemas sistémicos que enfrentan los pueblos indígenas en la justicia, incluida la sobrepoblación de indígenas en las cárceles y la escasa representación que ellos tienen en los jurados”.
Según informa el National Post, además el MP Charlie Angus, del NDP, dijo en una pregunta al PM en el parlamento que “Nos incumbe decir que este Canadá no será una nación donde el asesinato sin sentido de jóvenes indígenas se considere correcto”.
La respuesta de Trudeau, además de lo mencionado, dijo que en Canadá “Estamos comprometidos con una amplia reforma para abordar estos problemas. Como país, debemos y podemos hacerlo mejor”.
En una reunión sostenida este domingo por miembros de la familia de Boushie en Ottawa, en la cual se encontraron con personeros políticos como la ministra de Relaciones Indígenas de la Corona, Carolyn Bennett, y la ministra de Servicios Indígenas, Jane Philpott, además de la Ministra de Justicia Jody Wilson-Raybould y el ministro de Seguridad Pública, Ralph Goodale.
Jade Tootoosis, madre de Boushie, dijo que la familia tenía “poca o ninguna fe en el sistema de justicia y estamos aquí para hablar sobre eso y pensar en formas de abordar eso”.
El juez de Saskatechewan dio la libertad al granjero Gerald Stanley, dio la libertad total al octogenario, tras haber sido acusado de haber perseguido a Boushie y sus cuatro amigos luego que ellos entraran de manera ilegal a su campo. Tras haber disparado dos tiros de advertencia, Stanley disparó a Boushie cerca de la nuca