Rodrigo Díaz M.
Más de la mitad de las pequeñas empresas canadienses son actualmente incapaces de contratar suficiente personal para continuar con sus operaciones o satisfacer la nueva demanda, según un nuevo informe, a pesar del aumento de los salarios en casi toda la economía.
El informe, publicado hoy por la Federación Canadiense de Empresas Independientes (CFIB, por sus siglas en inglés), reveló que el 55% de las pequeñas empresas canadienses no tendrían el personal necesario para gestionar sus tiendas, aunque otro 16% podría continuar con sus operaciones, pero con un coste adicional significativo.
“Las pequeñas empresas ya estaban experimentando una escasez de mano de obra muy significativa a principios de 2020, y la pandemia ha hecho que la situación sea aún más compleja”, dijo el vicepresidente de investigación nacional de la CFIB, Simon Gaudreault, en un comunicado de prensa.
“Las industrias que estuvieron paradas durante largos periodos de tiempo, como la hostelería, han visto un éxodo masivo a medida que los trabajadores mejoraban su cualificación o se cambiaban a otros empleos, y prácticamente todos los sectores se enfrentan a importantes trastornos demográficos al no llegar suficientes trabajadores nuevos para sustituir a los que se jubilan o renuncian”.
Según el informe, esta escasez generalizada de mano de obra se produce a pesar de que la “mayoría” de las empresas afectadas ya han subido los salarios de sus empleados. El problema ha llevado a muchos comercios a intentar contratar a trabajadores extranjeros temporales. Algunos también están intentando automatizar sus negocios.
La pandemia del COVID-19 ha llevado a grandes sectores de la economía al borde del abismo durante los dos últimos años, y ha afectado especialmente a las pequeñas empresas.
Los empresarios han atribuido tanto la escasez de mano de obra (la mayor parte de la cual se encuentra en los servicios de alimentación, la atención sanitaria y el comercio minorista) a que los trabajadores han optado por evitar trabajar en un entorno público durante la pandemia, como a las anteriores ayudas federales a la renta por COVID-19.
Según un informe de RBC, el número de puestos de trabajo vacantes n Canadá se disparó cerca de un 22% en el verano al reabrirse la economía. En junio, había más de 800 mil vacantes de empleo en Canadá, aunque la tasa de desempleo del país descendió en octubre a un mínimo pandémico del 6,7%.
A pesar del reciente repunte de las cifras de empleo durante el otoño, la CFIB advierte que la escasez de mano de obra “ha vuelto con fuerza”, y que cada vez más pequeñas empresas verán cómo el problema persiste.
Según el informe, las pequeñas empresas con escasez de mano de obra habían previsto aumentar sus salarios en un 3,7% durante el próximo año. Más del 80% de las empresas afectadas ya han subido sus salarios, pero la CFIB descubrió que su tasa de éxito era de un “mero” 31%, y que tres de cada cinco de esas empresas que subieron los salarios no lo consideraron útil para atraer trabajadores o solicitantes cualificados.