Rodrigo Díaz M.
Ontario notificó hoy de 4.362 casos de COVID-19, lo que eleva el número total de casos en la provincia a 412.745.
“A nivel local, hay 1.162 nuevos casos en Toronto, 936 en Peel, 430 en la región de York, 301 en Durham y 251 en Ottawa”, dijo la ministra de salud de Ontario, Christine Elliott.
También se registraron 34 nuevas muertes, lo que supone un nuevo récord durante esta tercera ola de la pandemia y eleva el número de víctimas mortales en la provincia a 7.698.
Se consideran resueltos un total de 364.353 casos, lo que supone un aumento de 3.611 y el 88,3% de todos los casos confirmados.
Se completaron más de 56.800 pruebas adicionales. Ontario ha completado ahora un total de 13.479.381 pruebas y 37.520 permanecen bajo investigación.
La provincia indicó que el porcentaje de positividad de las pruebas de detección del COVID-19 de hoy es del 6,9%, lo que supone un descenso con respecto a la de ayer, que fue del 8,2%, y un aumento con respecto a la del sábado pasado, que fue del 6,5%.
Las cifras provinciales mostraron que hay 2.065 personas hospitalizadas con el virus (un aumento de 110 y marcando un máximo de pandemia), con 726 en cuidados intensivos (un aumento de 25), 501 de las cuales están conectadas un respirador artificial (un aumento de 21).
Se han confirmado 32.327 casos de la variante B.1.1.7, descubierta por primera vez en el Reino Unido (2.152 más), así como 101 de la variante B.1.351, descubierta en Sudáfrica (dos más), y 207 casos de la variante P.1, descubierta por primera vez en Brasil (cinco más).
Hasta ayer por la noche, se habían administrado 3.751.316 dosis de la vacuna COVID-19 en Ontario, lo que supone un aumento de 107.278.
Hasta ahora, se considera que 344.244 personas de la provincia están totalmente vacunadas.
A nivel nacional, se han confirmado 1.111.965 casos desde el inicio de la pandemia y se han identificado 23.583 muertes causadas por el virus.
Hoy, el número de muertes por COVID-19 en todo el mundo superó los 3 millones de personas, en medio de repetidos reveses en la campaña de vacunación mundial y una crisis cada vez más profunda en lugares como Brasil, India y Francia.
El número de vidas perdidas, recopilado por la Universidad Johns Hopkins, equivale aproximadamente a la población de Kiev (Ucrania), Caracas (Venezuela) o el área metropolitana de Lisboa (Portugal). Es mayor que la de Chicago (2,7 millones) y equivalente a la de Filadelfia y Dallas juntas.