Rodrigo Díaz M.
Ontario podría correr el riesgo de sufrir un déficit de energía este verano si las olas de calor continúan, según un informe de un regulador eléctrico norteamericano.
La provincia es la única región canadiense que, según la evaluación de fiabilidad de mayo, corre un “riesgo elevado” de sufrir cortes del suministro eléctrico en caso de que aumenten las temperaturas.
El informe, publicado por la organización sin ánimo de lucro North American Electric Reliability Corporation (NERC), sugiere que Ontario ha entrado en un periodo en el que “las interrupciones de generación y transmisión serán cada vez más difíciles de prevenir “.
El informe señala que las interrupciones previstas debido a la renovación de centrales nucleares han reducido los recursos de suministro eléctrico. También sugiere que la zona de Windsor-Essex podría no disponer de “suministro suficiente” debido al aumento de la demanda.
Sin embargo, el regulador también afirma que Ontario podría depender de las importaciones y de la gestión de los cortes durante un “número significativo de semanas”, tanto en condiciones meteorológicas normales como extremas.
Tom Chapman, economista especializado en energía de The Brattle Group, declaró que el riesgo de escasez de energía es “ligeramente mayor” debido a los cortes generados y al posible mal tiempo, aunque no prevé cortes masivos de electricidad a menos que se den circunstancias extremas.
“Es casi seguro que estaremos bien. No hay motivos para alarmarse”, aseguró Chapman. “Se trata de que los operadores del sistema hagan una planificación prudente y se aseguren de que ponen todo en marcha para que no se produzca un corte localizado de la red”.
Chapman explicó que Ontario ha recorrido un largo camino desde el verano del 2003, cuando un apagón masivo provocó la falla del servicio eléctrico inclusive en loes Estados Unidos.
La provincia ha aumentado su suministro de energía renovable, nuclear e hidroeléctrica y si Ontario se ve en un aprieto, cuenta con más alianzas y puede comprar energía a sus vecinos para mantener las luces encendidas.
“Estamos en una situación mucho más sólida que en el 2003”, dijo Chapman. “Tenemos más herramientas para hacer frente a circunstancias difíciles que en el pasado”.