Rodrigo Díaz M.
La ministra de salud de Ontario, Christine Elliott, reveló que el gobierno provincial reabrirá las instalaciones recreativas “el 2 de junio o antes”, cuando expire la actual orden de permanencia en los hogares.
El gobierno de Ford decidió cerrar todas las instalaciones recreativas el pasado 16 de abril, en medio de una devastadora tercera ola de la pandemia del COVID-19.
La decisión molestó a varios epidemiólogos y expertos públicos que han sostenido sistemáticamente que el riesgo de contraer COVID-19 al aire libre es extremadamente bajo.
También se produjo a pesar del consejo de la Mesa de Asesoramiento Científico de Ontario, que advirtió que cualquier política que desaliente las actividades al aire libre hará poco para controlar la propagación del COVID-19 y tendrá un efecto mental desproporcionado en los niños.
En su intervención durante el periodo de preguntas en Queen’s Park el lunes, Elliott dijo que su gobierno sigue creyendo que sería “irresponsable” reabrir las instalaciones recreativas hoy con los recuentos de casos todavía elevados, pero también dio la indicación más clara hasta la fecha de que algunas instalaciones recreativas volverán a abrir pronto, quizás incluso antes de que expire la actual orden de permanencia en casa.
Doug Ford ha defendido el cierre de las instalaciones recreativas como una forma de reducir la movilidad y disuadir a la gente de salir de sus casas para fines no esenciales.
Pero otros han argumentado que los cierres han hecho más daño que bien.
Los comentarios de Elliott de hoy se producen a raíz de un nuevo informe de un grupo de investigadores que pide al gobierno de Ford que “dé prioridad inmediata a las actividades al aire libre para niños y jóvenes” con el fin de ayudar a mitigar algunos de los efectos “devastadores” que las restricciones relacionadas con la pandemia han tenido en su salud y bienestar.
El informe, elaborado por investigadores del SickKids Hospital, sostiene que la pandemia ha tenido un “efecto dramático” en la salud física y mental de los niños, ya que les ha privado de “importantes interacciones sociales, emocionales y físicas”.
Los investigadores afirman que su informe debe servir de “llamada a la acción” con el objetivo de “facilitar el aumento de los niveles de actividad entre los niños y los jóvenes durante y después de la pandemia, centrándose en la actividad al aire libre”.
En total, hacen decenas de recomendaciones, pero las principales son “reanudar y aumentar la práctica de los deportes y las actividades organizadas y los campamentos comunitarios al aire libre” y reabrir las instalaciones recreativas, como campos deportivos, piscinas y espacios de camping.
“Ontario no puede permitirse el lujo de ignorar las crecientes consecuencias de las restricciones de la pandemia en la salud y el bienestar de los niños y los jóvenes”, afirman los investigadores.