El primer cierre debido a la pandemia del COVID-19 fue devastador para los dueños de negocios en Canadá y muchos dudan si podrán seguir operando si la situación actual se extiende o, peor aún, si se intensifica.
Rodrigo Díaz M.
Ahora que la segunda ola del COVID-19 ya fue declarada de manera oficial hace varias semanas, y que se están implementando restricciones adicionales a las empresas, a muchos propietarios de pequeñas y medianas empresas les preocupa que sus negocios no sobrevivan a otro cierre.
Según una encuesta reciente de KPMG Canada, el 31% de los propietarios de empresas creen que su negocio no sobrevivirá a una segunda ronda de cierres.
“Nos encontramos en un momento crucial que podría hacer o deshacer muchas pequeñas y medianas empresas”, dijo John Cho, jefe de los servicios de asesoramiento de KPMG, en un comunicado de prensa.
El 54% dijo que su enfoque actual es sólo la supervivencia de su negocio, mientras que casi un cuarto (24%) está buscando vender su negocio, ya que el aumento de los costos y los desafíos asociados con la gestión y la protección de sus empleados durante la pandemia se han vuelto insostenibles.
“Uno de cada cuatro empresarios se arrepiente de no haber vendido su negocio antes, y el mismo número está ahora buscando vender debido a los complejos desafíos y costos de sus operaciones provocados por la pandemia”, explicó Cho.
Lo más alarmante es que el 40% de los encuestados dijo que su negocio no se recuperará nunca de las consecuencias económicas de la pandemia.
Sin embargo, según Cho, algunas empresas se encuentran en posición de hacer crecer su negocio, ya sea orgánicamente o a través de adquisiciones.
Según los resultados, el 29% de los empresarios ven la pandemia como una oportunidad para hacer crecer sus negocios.
A la luz de las restricciones y los cierres que se están produciendo, muchas empresas se han visto obligadas a pasar a la tecnología digital: el 78% de los empresarios creen que deben pasar a la tecnología digital si quieren que sus empresas sobrevivan, mientras que el 64% se ha visto obligado a adoptar tecnologías digitales y emergentes debido a la pandemia.
La pandemia ha puesto de relieve lo esencial que han sido las inversiones en tecnología digital, no sólo para sobrevivir sino para estar en condiciones de tener éxito en el futuro.