Rodrigo Díaz M.
Más de tres años después de declararse la pandemia del COVID-19, todavía hay muchos canadienses que no han vuelto a la oficina a tiempo completo.
Una nueva encuesta de Unispace muestra que la gente no está interesada en volver por diversas razones.
La mitad de los trabajadores están en la oficina cuatro o más días a la semana, pero sólo al 31% le gusta estar en el lugar de trabajo con esta regularidad.
La desconexión entre lo que quieren los empleados y la oferta de trabajo es un posible factor determinante, ya que el 41% de los empleados comparten puesto de trabajo con otros empleados, pero el 79% sugirió que estarían más dispuestos a ir a la oficina si se les asignara un puesto propio, dice una parte de la encuesta.
Unispace descubrió que más de la mitad de los trabajadores canadienses (55%) son reacios a volver, porcentaje superior al promedio mundial del 51%.
Los principales factores son la falta de intimidad (34%), los niveles más bajos de productividad (29%) y la sensación de ser menos eficaces en un entorno de trabajo más ajetreado (28%).
El estudio concluye que si los empresarios quisieran realmente que la gente volviera a su espacio de trabajo, ofrecerían, o al menos considerarían la posibilidad de probar, una semana laboral de cuatro días.
El hecho de que algunas personas no vayan a la oficina en absoluto o lo hagan con menos frecuencia preocupa a las empresas que dependen de esos trabajadores para impulsar su cuenta de resultados.
Por otro lado, si los empleados no vuelven a los lugares de trabajo, esto podría suponer el fin de las tiendas y restaurantes del centro de varias ciudades. Muchos centros de las grandes ciudades se construyeron siguiendo el modelo de 9 de la mañana a 5 de la tarde. Esto podría pronto dejar de aplicarse o tendría que ser modificado si esta situación se agrava.