Rodrigo Díaz M.
A punto de cumplirse dos años de la guerra en Ucrania, más de un millón de refugiados ucranianos que han llegado a Alemania con la esperanza de rehacer sus vidas.
Mientras Alemania ha acogido a ucranianos y ha comprometido miles de millones en ayudas a Ucrania, miles de refugiados se encuentran en el limbo, atrapados entre un tenso sistema de inmigración y una crisis de alojamiento en la capital.
En Berlín, los alojamientos estatales para refugiados están casi al límite de su capacidad, los albergues municipales están llenos y los recién llegados sufren discriminación en un mercado de la vivienda ya de por sí muy competitivo.
El Centro de Llegadas de Tegel, en Berlín, se concibió como una ventanilla única: Los ucranianos se registrarían, recibirían un permiso de residencia temporal y un permiso de trabajo. Se les asignaría un lugar de residencia en uno de los 16 Estados federados de Alemania y se les facilitaría un billete de tren para llegar allí.
“Llegaban miles de refugiados cada día y necesitábamos una gran superficie donde poder registrar a un gran número de personas y alojarlas”, explica Monika Hebbinghaus, portavoz de la oficina estatal de asuntos de los refugiados de Berlín. “Este era un lugar lo suficientemente grande para hacerlo”.
El aeropuerto se cerró en el 2020, y se utilizó como clínica de vacunación durante toda la pandemia del COVID-19. Al estallar la guerra, se reconvirtió rápidamente en centro de registro y refugio de emergencia. Ahora, dos años después, el antiguo aeropuerto se ha convertido en su propia pseudocomunidad.
En toda Alemania, el 2022 marcó el mayor descenso de las tasas de desocupación en 20 años, según la consultora inmobiliaria CBRE y la empresa de investigación Empirica. Se prevé que la tasa de vacantes de la ciudad de Berlín se sitúe en torno al 0,3%.
El otoño pasado, el gobierno alemán anunció un paquete de ayudas de 45 billones de para fomentar la construcción de nuevas viviendas. Las elevadas tasas de interés y los cambios en los requisitos de edificación han frenado la construcción de nuevos complejos de apartamentos.