Rodrigo Díaz M.
Tras haber juramentado a su nuevo gabinete ministerial a mediados de mayo, el primer ministro Mark Carney reiteró sus objetivos generales para el sistema de inmigración de Canadá mediante una carta de mandato dirigida a su gabinete.
En dicho comunicado el primer ministro Carney señala que su gobierno desea devolver la inmigración global a niveles sostenibles y atraer a los mejores talentos de todo el mundo para ayudar a construir la economía de Canadá, como objetivos principales de su gestión en inmigración, que será orquestada desde la oficina de la nueva ministra de inmigración, Lena Metlege Diab.
Anteriormente, durante la campaña electoral, los liberales liderados por Carney se presentaron con un programa electoral basado en la estabilización de los niveles de inmigración de residentes permanentes, reconociendo que el anterior gobierno liberal había permitido que los niveles de inmigración aumentaran a un ritmo “insostenible”
Según el Plan para el periodo 2025-2027, el gobierno federal pretende admitir 395 mil residentes permanentes en el 2025, 380 mil en el 2026 y 365 mil en el 2027.
El programa electoral del Partido Liberal también incluía planes para actualizar la Estrategia Global de Competencias (GSS) con el fin de atraer a profesionales clave para ayudar a construir y apoyar sectores críticos de la economía canadiense.
La GSS es un programa federal de permisos de trabajo que apoya a las empresas canadienses que cumplen los requisitos facilitando la contratación de trabajadores extranjeros cualificados. En el marco de este programa, los extranjeros pueden obtener un permiso de trabajo por vía rápida, normalmente en un plazo de dos semanas.
Los cambios propuestos en el programa electoral liberal incluían nuevas iniciativas destinadas a ayudar a las empresas y los emprendedores canadienses de alto crecimiento a atraer talento. El programa también destaca el interés por atraer a profesionales altamente cualificados de Estados Unidos.
Además, el partido se comprometió a colaborar con las provincias y territorios para mejorar y acelerar el reconocimiento de las titulaciones extranjeras y la experiencia laboral internacional, lo que permitirá a los trabajadores extranjeros cualificados integrarse de forma más rápida y eficaz en el mercado laboral canadiense.
Las cartas de mandato son directivas especiales que el primer ministro entrega a los miembros del gabinete y en las que suele esbozar los principales objetivos y, en ocasiones, incluso los métodos que el primer ministro desea que su gabinete siga para cumplir y alcanzar su mandato gubernamental.
En el pasado, los primeros ministros canadienses solían entregar cartas de mandato individuales a cada ministro. Por el momento, no está claro si Carney seguirá este patrón.











