Solo faltaría que Quebec y Nueva York firmen para conseguir la aprobación total del proyecto de ley.
Rodrigo Díaz M.
Los parlamentarios de Ontario han votado a favor de detener la práctica bianual de cambiar los relojes una hora más o una hora menos, pero ello dependería de que el Gobierno de Quebec y el estado de Nueva York aprobaran leyes similares.
La propuesta fue presentada por primera vez por el diputado del PC de Ottawa West-Nepean, Jeremy Roberts, en octubre.
Sin embargo, Roberts emitió una declaración ayer por la noche, diciendo que su proyecto de ley aprobó por unanimidad el último paso legislativo en Queen’s Park.
El proyecto de ley 214, que aún necesita el consentimiento real del vicegobernador de Ontario, movería a Ontario al horario de verano de forma permanente.
La legislación sólo entraría en vigor “en coordinación” con Quebec y Nueva York.
En cuanto a la razón para querer el cambio, la declaración de Roberts citaba estudios académicos que sugieren que los cambios de reloj bianuales pueden causar “graves efectos negativos” en lo que respecta a la salud.
En la declaración también se decía que el cambio “probablemente” ayudaría a promover una mayor actividad de compras.