En una decisión que viene del creciente número de solicitantes de asilo que cruzan la frontera desde los Estados Unidos hasta Canadá.
Montreal se unirá a Vancouver, Toronto, Londres, Ont., y Hamilton, Ont. en la adopción de una política formal para asegurar que los inmigrantes indocumentados tengan acceso a servicios municipales tales como refugios financiados por la ciudad, vivienda y bancos de alimentos.
La regulación fue presentada por el alcalde Denis Coderre, quien anteriormente sirvió como ministro de inmigración de Canadá.
“Creo que tenemos que tener una puerta en lugar de una pared”, dijo Coderre a los medios después de la votación.
El lunes, Coderre dijo que simpatizaba con la difícil situación de aquellos que abandonaron sus hogares en el extranjero con la esperanza de encontrar seguridad en Quebec. Dice que quiere brindar un acceso más amplio a “atención médica, vivienda e integración”.
“Hay mucha gente que es víctima. Han sido víctimas de actos terroristas. Ellos han sido expulsados de su país o han salido debido a su situación, orientación sexual, (como) refugiados políticos “, dijo antes de que la ley fuera aprobada el lunes. “Creo que deberíamos enderezar esa situación y encontrar una manera de ayudar a los indocumentados”.
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