El hurto es una industria multimillonaria en Canadá, según los investigadores, y es difícil de controlar para las autoridades.
Las empresas están siendo atacadas en las estafas de venta al por menor a gran escala, a menudo basadas en un comprador individual – llamado un “valla” – que utiliza un método depredador para convencer a otros de hacer el robo para ellos.
Los vallas buscan a los residentes vulnerables, a menudo drogadictos, y les pagan 10 centavos por dólar por los artículos que roben de las tiendas locales. La policía lo llama “valla depredadora”.
En algunos casos incluso compran drogas para sus ladrones contratados, siempre y cuando los individuos sigan robando, dijo la policía de Vancouver a los medios.
Los funcionarios estiman que aproximadamente $ 50,000 en bienes robados se intercambian en un solo bloque de East Hastings Street todos los días. Los artículos van desde cuchillas de afeitar hasta trajes de diseñador.
Las mercancías son inspeccionadas cuidadosamente por los compradores y son entonces revendidas en el mercado negro, a menudo afuera de condominios o sótanos, o en sitios como Craigslist y eBay.
Otros ladrones manejan sitios web, prometiendo robar cualquier cosa que un cliente ordene, dijo la policía.Algunos de los artículos robados se envían a China.
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