Mientras que los números pueden estar inflados debido a algunos errores de cálculo, la tasa de infecciones de Ontario por COVID-19 ha alcanzado un nuevo máximo hoy y las dosis de vacunas se están agotando.
Rodrigo Díaz M.
La provincia está reportando 4.249 nuevos casos del virus, la primera vez que se ha alcanzado el umbral de los 4.000, y las repercusiones están comenzando a mostrarse en todas las plataformas de atención médica.
“Esta es la situación más grave en la que hemos estado desde el comienzo de la pandemia”, dijo el premier de Ontario, Doug Ford, al reiterar la necesidad de que el público siga los protocolos de salud.
Además, Ford dijo que la mayoría de los hospitales se quedarán sin la vacuna para la próxima semana si no llegan nuevas dosis, lo que significa que las citas programadas para recibir la vacuna serán canceladas.
“Necesitamos vacunas”, añadió Ford durante su conferencia de prensa de hoy. “Sé que el gobierno federal está tratando, están haciendo todo lo posible, pero las necesitamos”.
Ford dijo que la semana que viene se introducirá un nuevo sistema de modelos que mostrará lo drástica que se ha vuelto la situación. Advirtió que es probable que en el horizonte haya medidas y sanciones más estrictas para proteger a la población del COVID-19.
“Cuando vean los nuevos números, se darán cuenta”, dijo. “No importa lo que haga el gobierno provincial o el gobierno federal, sin la cooperación de la gente esto se saldrá de control. Por favor, siga los protocolos. Estamos en una situación muy grave. Todo está sobre la mesa. Habrá más medidas porque esto se está saliendo de control”.
La Dra. Barbara Yaffe, jefa adjunta de salud de Ontario, se hizo eco de las preocupaciones del Primer Ministro diciendo que las cifras de hoy son “aterradoras” y que habrá que tomar medidas drásticas para frenar el aumento de los casos.
“Cada vez hay más gente hospitalizada, más gente en la UCI, más gente con ventilación”, dijo el Dr. Yaffe. “Los hospitales están recortando procedimientos importantes. Están empezando a trasladar a los pacientes a diferentes hospitales. Lo que estamos viendo es una mayor propagación de esta infección en la comunidad. No queremos asustar a la gente, pero por otro lado hay demasiada complacencia”.