Rodrigo Díaz M.
El 98% de los empleados del Ayuntamiento de Toronto han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19, según informaron hoy las autoridades municipales.
El 99% de los empleados en general ya ha informado de su estado de vacunación.
Los empleados debían haberse vacunado completamente contra el COVID-19 (ya sea una dosis doble o una dosis única) y haberlo comunicado al Ayuntamiento antes del 30 de octubre en virtud de su Política de Vacunación Obligatoria COVID-19.
Menos de 1.300 empleados (408 trabajadores que declararon no estar vacunados, 356 que respondieron, pero optaron por no revelar su situación y 533 que aún no han respondido a la encuesta) permanecen ahora bajo una inminente suspensión o despido no remunerado.
El siguiente paso es que los gerentes y supervisores se reúnan con el personal que no cumple la política para revisar su estado de vacunación contra el COVID-19. El personal que siga incumpliendo la normativa se enfrenta a una suspensión no remunerada de hasta seis semanas.
Los que hayan declarado haber recibido una dosis tienen hasta el 15 de noviembre para vacunarse completamente.
A partir del 13 de diciembre, los miembros del personal que no presenten una prueba de inmunización completa serán despedidos por causa justificada, “ya que habrán optado por no cumplir con la política de vacunación obligatoria”, dijo hoy el Ayuntamiento.
“Esta política consiste en proteger la salud y la seguridad de todos los empleados de la Ciudad, sus familias y nuestros residentes. Hemos observado un progreso continuo en las tasas de vacunación de nuestro personal en los últimos tres meses”, dijo el alcalde John Tory.
“Espero que los empleados que aún no se hayan vacunado den ese importante paso lo antes posible”.
