El decaimiento de los dientes no ocurre tan solo por el azúcar. También ocurre por tener malos hábitos dentales y por dejar el dulce en los dientes por largos periodos de tiempo.
Hay que asegurarse de que sus hijos se laven los dientes tres veces al día. Se deben asegurar de limpiar entre los dientes y asistir a citas con el dentista regularmente.
También se habló de los daños que causan ciertos dulces. Por ejemplo, el chocolate es el dulce que menos afecta la dentadura, pues este se disuelve rápidamente en la boca.
Las nueces, el chicle sin azúcar y las semillas de plantas son también muy buenas opciones.
Los peores dulces para los niños son las chupetas y otros dulces duros, los cuales toman mucho tiempo en disolverse y pueden hasta partir algunos dientes.
Por otro lado los caramelos, como las uvas pasas pueden quedarse entre los dientes por largos periodos de tiempo. Asimismo, los dulces ácidos pueden dañar el esmalte de los dientes.
El presidente de la Asociación, el Dr. Jack McLister, afirmó que “los niños pueden disfrutar de la festividad siempre y cuando sepan que los dulces son solo un placer momentáneo y no deberían ser parte de su dieta habitual”.