La aplicación de rastreo de contactos del COVID-19 del gobierno federal está siendo criticada por sus requisitos de descarga, que restringen a algunos el acceso y el uso de la aplicación.
Rodrigo Díaz M.
La aplicación gratuita ” COVID Alert”, que fue lanzada el viernes de la semana pasada, está diseñada para rastrear la ubicación de los teléfonos en relación con los demás, sin recopilar datos personales en ningún lugar de forma centralizada.
Los usuarios son notificados si sus teléfonos han estado recientemente cerca del teléfono de una persona que luego se ofrece como voluntario y que ha dado positivo en COVID-19.
Pero la aplicación requiere que los usuarios tengan teléfonos Apple o Android fabricados en los últimos cinco años, y un sistema operativo relativamente nuevo.
Christopher Parsons, investigador asociado de Citizen Lab, parte de la Escuela Munk de Asuntos Globales y Política, dice que eso hace que la aplicación sea inaccesible para las personas de tercera edad y otros grupos marginados.
Parsons dice que las críticas deben dirigirse al gobierno federal, no a quienes diseñaron la aplicación.
Cree que los aspectos técnicos de la aplicación, como su facilidad de uso y su rendimiento en los dos idiomas oficiales, se ha hecho bien.
Por otro lado, el tema de necesitar una aplicación que funcione con los smartphones más antiguos era conocido desde el principio, añadió.
Para que una aplicación de rastreo de contactos funcione correctamente, dijo, se requiere que entre el 65% y el 80% de todos los habitantes de Canadá la utilicen. La versión actual de la aplicación hace que eso sea imposible.
La Secretaría de la Junta del Tesoro de Canadá remitió las preguntas sobre los requisitos técnicos de la aplicación a Google y Apple, pero señaló que la aplicación es sólo una herramienta para frenar la difusión de COVID-19.
Por ahora, la aplicación para teléfonos inteligentes sólo está vinculada al sistema de salud de Ontario, y las provincias del Atlántico serán las próximas en conectarse.