Algunos de estos programas se manejan a través de los tratados de libre comercio. Cada uno de los tratados cuenta con un capitulo para inversionistas o comerciantes que puede ser usado con el propósito de iniciar un negocio en Canadá. En estos casos, los candidatos obtienen inicialmente un permiso de trabajo a través del cual pueden llegar a Canadá a poner en funcionamiento sus empresas o negocios. Estos candidatos no tienen un paso directo a residencia permanente a menos de que el puntaje que obtengan en el Express Entry, sumando obviamente los puntos que se les otorgan por experiencia laboral en Canadá, sean suficientes para ser invitados a solicitar la residencia por el gobierno federal. Bajo los tratados de libre comercio no hay un monto especifico mínimo de capital que el candidato debe invertir ni tampoco un monto mínimo de patrimonio que deba tener. El candidato debe demostrar que tiene los recursos necesarios para iniciar su negocio y que tiene la experiencia y capacidad para que este sea exitoso. La inversión propuesta en el plan de negocios debe ser proporcional a lo que se requiere para iniciar un negocio como el propuesto en Canadá.
Por otro lado, cada una de las provincias de Canadá tiene su propio programa de negocios –con excepción de New Foundland y Nunavut-. Bajo los programas de nominación provincial los requisitos son más exigentes que bajo los tratados de libre comercio, pero, a diferencia de los Tratados de Libre Comercio, los programas de negocios de las provincias conducen a la residencia permanente a través de una nominación provincial.
Algunas provincias facilitan la solicitud de un permiso de trabajo con una duración de 2 años, para que el candidato llegue a Canadá a poner en marcha el proyecto que le fue presentado a la provincia – y aprobado por ella- y si las propuestas hechas en el plan de negocio son cumplidas por el candidato, la provincia otorga la nominación provincial que es en definitiva la entrada segura a residencia en Canadá. Hay un par de provincias que una vez aprobado el proyecto dan la nominación provincial para que el candidato llegue como residente permanente a empezar su negocio en Canadá. Estas provincias exigen que el candidato deje un depósito de garantía el cual será reembolsado si durante los dos años siguientes a la obtención de la residencia permanente el candidato cumple con los compromisos adquiridos con la provincia que básicamente dependen de lo planteado en el plan de negocios.
Cada una de las provincias tiene unos parámetros definidos de capital, monto de inversión, número de empleos para residentes y/o ciudadanos Canadienses que deben ser creados por el candidato, área de residencia del candidato y tiempo de permanencia en la provincia mientras se encuentran con el permiso de trabajo previo a la residencia. Los montos varían entre $300,000 de capital e inversión de $125,000 hasta 1.5 Millones de capital y 1 millón de inversión. Sin embargo el contar con estos montos no garantiza la aprobación de la provincia, es la viabilidad del proyecto el factor determinante para ser aceptado bajo el programa de negocios.
Algunas de las provincias dentro de sus programas cuentan con una lista de negocios que no son permitidos bajo el programa, otras cuentan con una lista de negocios a los que se les da prioridad para nominación o soporte de permiso de trabajo. Muchas de ellas incluyen una tabla de calificación por puntaje que se otorga por factores como edad, experiencia como dueños de negocio o altos gerentes, ubicación geográfica del negocio propuesto, dominio del idioma, monto de inversión y número de empleos propuestos a generar.
Bajo todos los programas de nominación provincial dentro de la categoría de negocios la inversión pasiva –inversión en propiedad raíz- es considerada inelegible y dentro de las condiciones de todas las provincias está el que el candidato se encuentre viviendo legalmente en el país de residencia actual o que sea elegible para que el gobierno Federal le apruebe un permiso de trabajo temporal. Esto descalifica como candidatos a quienes se encuentran sin estatus en el país donde se encuentren viviendo.
Alberta, Saskatchewan y Manitoba tienen programas específicos para granjas o haciendas, Nova Scotia le da prelación a negocios de exportación y turismo entre otros y Ontario da prelación a compañías en el área de tecnología y en procesamiento de comidas y bebidas.
Las posibilidades son muchas y muy variadas y están disponibles para quienes tengan la experiencia y la capacidad económica para apoyar el crecimiento económico de Canadá.
Claudia Palacio., RCIC
ICCRC R 416911
*Claudia Palacio es Consultora de Inmigración Certificada y colaboradora de este semanario. Pueden dirigir sus preguntas a [email protected]