Rodrigo Díaz M.
Según un nuevo informe, los tiempos de espera en los hospitales de Ontario siguen empeorando, lo que lleva a cuestionar de nuevo la eficacia de las medidas introducidas por el gobierno de Ford durante el verano para hacer frente a la crisis sanitaria de Ontario.
Un informe de Ontario Health titulado “acceso a la atención”, obtenido y publicado íntegramente por los liberales de Ontario, muestra que muchas personas esperaron más tiempo para ser atendidas en los hospitales en septiembre, en comparación con el año y el mes anteriores.
Las cifras dibujan un panorama de un sistema de salud en el que la experiencia de los pacientes no hace más que empeorar.
El informe revela que, a las 8 AM de todos los días de septiembre, 946 personas esperaban en un servicio de urgencias de Ontario por una cama en el hospital, lo que supone un aumento del 45% respecto a septiembre de 2021 y un incremento del 7% respecto a agosto.
El tiempo que se tarda en sacar a los pacientes de una ambulancia también aumentó de un mes a otro y de un año a otro.
En septiembre, la mayoría de los pacientes traídos al hospital en ambulancia tuvieron que esperar hasta 90 minutos para ser descargados. Esto supuso un aumento del 52,5% respecto a 2021 y del 8% respecto a agosto.
“Es un nuevo precedente sobre una base mensual”, dijo el Dr. Adil Shamji, el MPP liberal que obtuvo los datos. “Los médicos nunca habían visto algo así”.
Los indicios de que el sistema de salud de Ontario continuó tambaleándose en septiembre se produjeron a pesar de una ola de anuncios políticos destinados a mejorar la situación.
El mes de agosto estuvo marcado por varios anuncios del gobierno de Ford que, según la ministra de salud, Sylvia Jones, ayudarían al maltrecho sistema sanitario de la provincia.
En la conferencia de la Asociación de Municipios de Ontario, celebrada en Ottawa, Jones dijo que mejoraría un programa que permite a los paramédicos evitar llevar a los pacientes a la sala de urgencias en cada llamada.
“No podemos seguir apoyando un statu quo que no puede responder a los retos actuales del sector”, dijo.
“En su lugar, guiado por las mejores pruebas y los éxitos de otras jurisdicciones, nuestro gobierno tomará medidas audaces que den prioridad a los pacientes y a su atención sanitaria por encima de todo”.
El gobierno de Ford también presentó un controvertido proyecto de ley para liberar camas hospitalarias que permitía a los hospitales trasladar a los pacientes de nivel de atención alternativo a una residencia de cuidados a largo plazo que no eligieran o cobrarles por permanecer en el hospital.
El informe sugiere que las nuevas medidas no tuvieron un impacto inmediato ni detuvieron la caída de las condiciones hospitalarias.
En septiembre, tras la evaluación inicial con una enfermera, la mayoría de los pacientes pasaron hasta 45,2 horas en el servicio de urgencias a la espera de ser admitidos en el hospital.
Ese tiempo de espera supone un aumento de 1,1 horas en comparación con agosto.
Los pacientes también esperaron una media de aproximadamente una hora más para ser trasladados a una cama de hospital (34,9 horas) que el mes anterior.