Rodrigo Díaz M.
China expulsó hoy a un diplomático canadiense en Shanghai, un día después de que Canadá anunciara que expulsaría a un diplomático chino por acusaciones de que estaba implicado en intentos de intimidar a un político canadiense.
En un comunicado emitido hoy, el ministerio de asuntos exteriores de China declaró que condenaba enérgicamente la expulsión del diplomático Zhao Wei, residente en Toronto, y que, como “contramedida recíproca”, declararía persona non grata a Jennifer Lynn Lalonde, cónsul del consulado general de Canadá en Shanghai.
Según el comunicado, se ha pedido a Lalonde que abandone China antes de este sábado 13 de mayo.
La medida de ojo por ojo marca un nuevo mínimo en un deterioro de los lazos entre los dos países que lleva años y se produce en medio de un período de creciente preocupación en Canadá por la influencia china, incluido el alboroto público por las acusaciones de que China intentó entrometerse en las elecciones canadienses del 2019 y del 2021.
Horas después de que Pekín anunciara que expulsaría a Lalonde, un portavoz del ministerio de asuntos exteriores en una sesión informativa periódica amenazó con que China “respondería de manera contundente” si el gobierno canadiense “sigue actuando imprudentemente” y acusó a los medios de comunicación canadienses y a algunos políticos de “fabricar información falsa.”
Canadá tomó medidas para expulsar a Zhao el lunes, tras la creciente presión pública sobre el gobierno canadiense para que respondiera a las revelaciones de que el Servicio de Inteligencia de Seguridad Canadiense (CSIS) descubrió que un diplomático chino acreditado en el país había realizado gestiones para poner en el punto de mira al legislador de la oposición Michael Chong y a familiares que pudieran estar en China.
La supuesta persecución tuvo lugar después de que Chong patrocinara una moción para condenar el trato de China a su minoría musulmana uigur.
La ministra canadiense de asuntos exteriores, Melanie Joly, declaró el lunes que Ottawa “no tolerará ninguna forma de injerencia extranjera en nuestros asuntos internos”. Los diplomáticos en Canadá han sido advertidos que, si incurren en este tipo de comportamiento, serán enviados a casa”.
Pekín ha negado reiteradamente las acusaciones de injerencia política en Canadá.
Las relaciones entre los dos países ya han sufrido tensiones significativas en los últimos años, en particular tras la detención por parte del gobierno chino de dos canadienses en China en un movimiento ampliamente visto como represalia por la detención en el 2018 por parte de Canadá de una empresaria china, Meng Wanzhou.
