Rodrigo Díaz M.
Quebec ha dado marcha atrás en sus planes de imponer multas a las personas no vacunadas contra el COVID-19 tras la creciente oposición a la controvertida medida y ha anunciado que a finales de este mes se levantarán otras medidas de salud pública.
El premier de Quebec, François Legault, dijo que había preparado un proyecto de ley para presentarlo en la Asamblea Nacional, pero afirmó que se había dado cuenta de que la legislación habría sido demasiado divisiva.
“Comprendo que esto divide a los quebequenses, y en este momento tenemos que escucharnos unos a otros, los quebequenses deben permanecer unidos”, dijo durante una conferencia de prensa sobre la situación del COVID-19 en Quebec.
“Estamos viendo un creciente descontento. He visto, por supuesto, la reacción de los partidos de la oposición. Así que creo que también tengo una responsabilidad más allá de proteger la seguridad de los quebequenses incitando a Quebec a vacunarse. También tengo la responsabilidad de que toda esta gente aprenda realmente a vivir junta. No queremos un Quebec dividido”.
El gobierno de Legault ya está siendo elogiado por la decisión. La Federación Canadiense de Contribuyentes (CTF, por sus siglas en inglés) dijo hoy que el premier tomó la decisión correcta.
“Hace falta ser humilde para admitir que se ha equivocado, y el premier François Legault ciertamente ha mostrado su lado humilde y ha hecho lo correcto hoy”, dijo el director de CTF Quebec, Renaud Brossard, en un comunicado.
Con la tendencia a la baja de las hospitalizaciones en los últimos días y el menor número de ausencias entre los trabajadores sanitarios, Quebec anunció que también está en mejor posición para levantar más restricciones de salud pública.
A partir del 14 de febrero, los gimnasios y spas podrán reabrir sus instalaciones al 50% de su capacidad, aseguró Legault. Los deportes para adultos y las actividades artísticas también se reanudarán en esa fecha para grupos de hasta 25 personas.
Legault dijo que 10.600 trabajadores de la salud siguen ausentes y que “la situación está mejorando en nuestros hospitales, pero no podemos olvidar que todavía tenemos un largo camino por recorrer para reanudar las cirugías que se han retrasado.”
La cautela es la razón por la que otros negocios tienen que permanecer cerrados en Quebec, como los bares y discotecas, mientras la provincia busca seguir reabriendo más sectores de la economía por fases.