Rodrigo Díaz M.
Dado que hoy vuelven a clase más estudiantes, el gobierno de Ontario va a destinar 381 millones de dólares adicionales, proporcionados a través del Fondo federal para el Retorno a Clase Seguro, para mantener las escuelas seguras frente al COVID-19.
Aunque la transmisión en las escuelas ha sido baja, esta financiación se utilizará para mejorar la calidad del aire y la ventilación en las escuelas, apoyar el aprendizaje online, promover la salud mental de los estudiantes y contratar personal adicional. Con esta nueva financiación, las escuelas habrán recibido más de 1.6 billones de dólares para proteger mejor a los estudiantes, al personal y a las familias.
“Para proteger a los estudiantes y al personal de Ontario, y con el objetivo de reabrir todas las escuelas, hemos reforzado de nuevo nuestro plan con medidas más estrictas y nuevas inversiones”, dijo el ministro de educación de Ontario, Stephen Lecce.
“Estamos de acuerdo con los padres y los expertos médicos en que los niños deben aprender en clase junto a sus amigos y profesores, ya que es crucial para su bienestar mental y su desarrollo. Continuaremos siguiendo los consejos médicos de los expertos y trabajaremos para que todas las escuelas estén abiertas, para los niños de todas las regiones de nuestra provincia.”
A partir del 1 de febrero de 2021, más de 520 mil estudiantes de toda Ontario podrán aprender en persona. Para apoyar su regreso seguro, y siguiendo el mejor consejo de los expertos, Ontario está introduciendo medidas adicionales para proteger aún más a los estudiantes y al personal, incluyendo:
- Acceso en toda la provincia a pruebas asintomáticas específicas para estudiantes y personal, utilizando una combinación de pruebas de PCR procesadas en laboratorio y pruebas rápidas de antígenos.
- Uso obligatorio de mascarillas para los estudiantes de los grados 1 a 3, incluso al aire libre cuando no se pueda mantener el distanciamiento físico.
- Mejora de las pruebas de detección de los alumnos y el personal de secundaria.
- Nuevas orientaciones que disuaden a los estudiantes de congregarse antes y después de clase.