Rodrigo Díaz M.
Según fuentes extraoficiales, el gobierno de Ford estaría trabajando en una legislación que se espera que otorgue mayores poderes a los alcaldes de Toronto y Ottawa, además de abordar el tema de la asequibilidad de la vivienda.
La legislación se presentaría en cuestión de semanas, después de que la asamblea legislativa de Ontario vuelva a celebrar una rara sesión de verano, a partir del 8 de agosto.
En el actual sistema municipal de Ontario, el alcalde tiene un solo voto en el consejo y necesita que la mayoría de los concejales se adhieran a su agenda para sacar adelante mociones, informes o proyectos.
Si la nueva legislación de la provincia aumenta significativamente el poder de los alcaldes, el papel de los concejales individuales podría verse disminuido. Los poderes también podrían incluir un veto del alcalde al consejo.
Adicionalmente, los poderes otorgados a los alcaldes solo podrían ser revocados si dos tercios del consejo aprueban dicha moción.
Rumores indican que ya se habrían celebrado debates formales en el gabinete sobre este asunto y que el alcance de la legislación aún se estaba afinando.
Los votantes de toda Ontario acudirán a las urnas el 24 de octubre para votar en las próximas elecciones municipales, en las que elegirán a un alcalde y a un concejal.
La posible agitación en los ayuntamientos de Toronto y Ottawa es un reflejo de una polémica medida que Ford tomó en 2018, cuando redujo el tamaño del ayuntamiento de Toronto a la mitad antes de la última ronda de elecciones locales.
En 2018, la campaña municipal estaba muy avanzada cuando la legislatura de Ontario aprobó una ley que redujo el número de escaños del consejo de Toronto de 47 a 25, alineándolos con las circunscripciones federales.
Ford argumentó en su momento que el cambio racionalizaría las operaciones del consejo y ahorraría 25 millones de dólares.
Actualización:
Doug Ford ha confirmado que tiene previsto introducir una amplia reforma de los poderes concedidos a los alcaldes de Toronto y Ottawa.
Hoy en Queen’s Park, Ford dijo que los dos alcaldes tendrían poder de veto sobre las decisiones del consejo, aumentando significativamente el poder legislativo que tienen.
“Son responsables de todo, pero tienen el mismo voto que un solo concejal”, dijo Ford. “No importa si es una buena decisión o una decisión difícil la que toman, tienen que rendir cuentas”.
Ford dijo que “entraría en los detalles” más adelante, pero confirmó que los alcaldes tendrían un veto que sólo podría ser anulado por una mayoría de dos tercios del consejo.