Rodrigo Díaz M.
El Parlamento francés prohibirá los cigarrillos electrónicos desechables de un solo uso, muy populares entre los adolescentes por sus dulces sabores y que están siendo analizados como una nueva fuente de basura.
La prohibición, apoyada por la primera ministra Elisabeth Borne y el ministro de salud Aurelien Rousseau, pretende proteger la salud de los jóvenes y mitigar el impacto medioambiental de los cada vez más populares productos desechables conocidos como “puffs”.
La Asamblea Nacional ya ha votado la medida el lunes por la noche en favor de la medida, que ya ha pasado al Senado y podría entrar en vigor en septiembre del 2024.
Los cigarrillos electrónicos desechables son pequeños dispositivos que funcionan con pilas y suministran nicotina vaporizada con diversos aromas. Aunque no contienen tabaco, muchos incluyen nicotina, una sustancia química peligrosa conocida por sus propiedades adictivas.
Los cigarrillos electrónicos desechables difieren de los dispositivos reutilizables en que no están diseñados para ser rellenados o recargados. Sus pequeñas baterías de litio no recargables suelen acabar en los vertederos.
Su creciente popularidad entre los adolescentes, debido a su sabor ácido o afrutado y a sus vistosos diseños, está causando alarma entre los legisladores.
Este proyecto de ley forma parte de una tendencia más amplia. El Reino Unido, Irlanda y Alemania están estudiando medidas similares. Nueva Zelanda y Australia ya han aplicado restricciones. Las medidas de Nueva Zelanda incluyen la obligación de reducir los niveles de nicotina y la restricción de las tiendas de vaping cerca de las escuelas.
El auge de los cigarrillos electrónicos desechables en el mercado estadounidense, principalmente procedentes de China, tras la prohibición de los cigarrillos electrónicos reutilizables de sabores como Juul por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en el 2020, ejemplifica el desafío más amplio. Las restricciones de sabores no se aplicaban a los productos desechables, que proliferaron a raíz de la normativa.